Llegar al cole

25 noviembre 2015

Llegar al colegio no debería convertirse en algo caótico, estresante o problemático si, de alguna forma, adoptáramos algunas medidas que nos hicieran reflexionar sobre si es necesario acercar el coche hasta la puerta del colegio, si nuestro hijo puede ir caminando al colegio solo o acompañado, si hay algún otro medio de transporte o si de verdad ahorro tiempo por utilizar mi vehículo.
Poco a poco vamos modificando los hábitos de desplazamiento. Pero este cambio ha de comenzar en la infancia y principalmente en el hogar a través de nuestro ejemplo. Generar el hábito de caminar o de utilizar transportes activos y alternativos necesita que demos la oportunidad de hacerlo y los estímulos e incentivos necesarios para que la conducta se repita con frecuencia, haciendo que ese hábito perdure en nuestros comportamientos. Como padres, tenemos la posibilidad de ir generando este cambio, que, sin lugar a dudas, repercutirá en nuestros hijos, en su salud y en su desarrollo evolutivo y social. Es cierto que el desplazamiento al colegio a pie aumentará y mejorará los niveles de actividad física en los niños, siendo los factores familiares especialmente influyentes y determinantes para ello.

AUTONOMÍA E HIJOS. Hoy día, son todavía muchos los niños que siguen yendo al colegio en coche y muchos, también, quienes añoran poder ir caminando en compañía de sus amigos, disfrutando de todo lo que la calle ofrece y haciéndolo tal y como lo hacíamos quienes ahora no somos tan niños. Está en nuestras manos, como máximos responsables, el dotar a nuestros hijos de la suficiente autonomía para realizar ese y otros trayectos de manera segura y sostenible.