La acera es para los peatones

06 marzo 2019

Organizado por la Dirección General de Tráfico, la Empresa Municipal de Transporte de Madrid (EMT) y la Fundación CONAMA, el Foro Ciudades a Pie reunió en Madrid el pasado 5 de marzo a más de cien expertos en movilidad. El debate se centró en recuperar la figura del peatón, un actor hasta ahora secundario en los desplazamientos urbanos.

Todos somos peatones

En la inauguración del Foro, Pere Navarro, director general de Tráfico, señaló que asumir que “la acera es para el peatón” cierra cualquier debate y supone un antes y un después. Agregó que los peatones son el eslabón más débil de la cadena de la movilidad y prueba de ello, dijo, es que cada año mueren en España más de 300 personas que se desplazaban caminando. Y estas cifras se disparan cuando sobre todo entre las personas más mayores (más del 70% de los atropellos).

Navarro subrayó que caminar no solo es el modo de transporte más antiguo, sino también el más saludable y el más sostenible. Además recordó que todas las personas en algún momento somos peatones y que entre el 40 y el 50% de los desplazamientos urbanos se producen a pie.

La fragilidad del peatón

Tras una introducción de la catedrática de Filosofía Cristina Marqués, en la que reflexionó sobre el placer del paseo, en el Foro se reivindicó el derecho de las personas a poder transitar a pie por las ciudades, frente a la actual hegemonía del coche. Fue Mateus Porto, representante del Foro Andando, quien, además, instó a las administraciones públicas a promover acciones para recuperar la calle para las personas.

Susana Estévez, vocal asesor del Gabinete de Dirección y Comunicación de la DGT, recordó las diferentes campañas de Tráfico centradas en el peatón. Casi todas ellas han venido insistiendo en la fragilidad del peatón frente a los demás medios de transporte. La periodista Ángela Alcover destacó que, aunque objetivamente hay más peatones que conductores, los primeros apenas tienen hueco en los medios de comunicación y, cuando lo hacen, son siempre noticias negativas (atropellos, mal comportamiento, etc.).

Más peatones, menos coches

Por parte de la DGT, Javier Villalba, jefe de la Unidad de Normativa, señaló que las ciudades viven un proceso de transformación urbana debido a la aparición de nuevos actores (bicicletas, patinetes, etc.). Por eso, destacó la necesidad de “blindar los espacios públicos para los peatones”, además de adaptarlos a las personas con movilidad reducida (accesibilidad). Según apuntó, el futuro pasa por más peatones en la ciudad y menos coches a menos velocidad. También destacó que España es líder en movilidad a pie, lo que puede ser un valor para el futuro.

Sheila Ferrer, del Observatorio Nacional de Seguridad Vial de la DGT, recordó que el riesgo de sufrir un accidente cuando una persona se desplaza a pie es nueve veces superior a cuando utiliza el coche. El riesgo aumenta con la edad y ese dato es importante porque, en el año 2033, el 25% de la población española será mayor de 65 años. Si no se logran entornos urbanos seguros, el número de peatones fallecidos aumentará inevitablemente, afirmó.

 

 

 

Una ciudad paseable 

El arquitecto Francisco José Lamíquiz reivindicó la calle como espacio urbano, una ciudad paseable con lugares para la estancia y la relación social. Por eso, los espacios urbanos deberían ser seguros, confortables, atractivos y accesibles. Isabela Velázquez, consultora el GEA 21, puso el foco en las personas más mayores porque para ellas “caminar es vivir, por calidad y cantidad de vida”. Según explicó, las calles deben tener más zonas verdes, más aceras y más bancos para poder descansar y ser más seguras.

El presidente de CERMI Madrid, Óscar Moral, recordó los numerosos obstáculos (vehículos aparcados, mobiliario urbano, terrazas, etc.) que se encuentran las personas con movilidad reducida cuando se desplazan por la ciudad. Sobre el papel, las normas están claras, apuntó, pero se incumplen de forma reiterada. Elena Cifuentes, de la EMT, destacó los esfuerzos de la empresa municipal de Madrid para eliminar barreras en el transporte público de la capital.

El papel de la Administración

La última parte del debate se centró en analizar el papel de las administraciones públicas en la transformación de la movilidad urbana. Por parte de los municipios, intervinieron representantes de los Ayuntamientos de Madrid, de Bilbao y de la FEMP (Federación Española de Municipios y Provincias).

Además, los tres coincidieron en pedir a la Administración colaboración para desarrollar políticas de movilidad que se centren en el peatón y que limiten el tráfico en las ciudades por motivos medioambientales. Entre las demandas que plantearon, destacan reducir a 30 km/h el límite de velocidad máxima en las vías urbanas, mejorar la señalización, regular el uso de los patinetes y apoyar económicamente el transporte público. En definitiva, reivindicaron ciudades más accesibles, más caminables y más humanas.

Por parte de la asociación STOP Accidentes, participó su vicepresidente Fernando Muñoz, quien pidió que la seguridad vial fuese un asunto de Estado y que se incluyera incluso en los planes de estudio. También habló de la necesidad de quitar más espacio a los coches para dárselo a los peatones.

Marta Seoane, de la Fundación CONAMA, y Ana Montalbán, de la Red Ciudades que Caminan, apostaron por una movilidad sostenible como elemento transformador de las ciudades y pidieron campañas de concienciación que pongan al peatón en el lugar que merece.