Manipular el tacógrafo, delito
- Una reciente sentencia del Tribunal Supremo abrió la vía para perseguir las manipulaciones del tacógrafo por la vía penal, como delitos de falsedad de documento oficial, penado con hasta 3 años de cárcel.
03 marzo 2020
El Fiscal de Sala Coordinador de Seguridad Vial, Bartolomé Vargas, remitió ayer un oficio a las policías con competencias en la regulación y vigilancia del tráfico –Guardia Civil, Mossos de Esquadra, Ertzaintza y Policía Foral de Navarra– para que, en los casos en que detecten manipulación de los tacógrafos de camiones y autobuses, instruyan atestados por un delito de falsedad en documento oficial.
Hasta ahora, la manipulación del tacógrafo se consideraba una infracción administrativa muy grave, castigada con multa para la empresa de transporte y con multa y retirada de 6 puntos en el permiso del conductor. No obstante, una reciente sentencia del Tribunal Supremo, de enero de 2020, estimaba un recurso de la fiscalía y abría la puerta a calificar estas manipulaciones como delito contra el Código Penal al considerar delito de falsedad en documento oficial “la manipulación fraudulenta de un tacógrafo que dé como resultado la alteración de los registros del instrumento, realizada con la finalidad de sortear los controles policiales y administrativos”.
“La manipulación esconde el hecho de ir más deprisa, con menos horas de descanso vulnerando la legislación”, ha dicho Vargas en una rueda de Prensa, que ha añadido que, en materia de autoría, "caben todas las formas de complicidad", por lo que la investigación no se limitará solo al conductor, sino al titular, encargado o propietario de la empresa propietaria del vehículo o del taller o de cualquier persona que lleva a cabo estos comportamientos de manipulación. Incluso Bartolomé Vargas ha dado indicaciones para la investigación de eventuales situaciones de abuso laboral conectadas con la manipulación de estos instrumentos que registran la velocidad y las horas de conducción en vehículos profesionales, así como de la siniestralidad de las furgonetas de reparto de las mercancías por carretera. “Se trata de conductas aisladas, que deben ser erradicadas del sector del transporte, que en nuestro país funciona de forma eficaz y con calidad”, ha resaltado el Fiscal.
El Fiscal de Seguridad Vial compareció acompañado de responsables de la Guardia Civil y los Mossos d'Esquedra, que detallaron el funcionamiento del tacógrafo y diferentes formas de manipularlo (imán, corte de corriente al tacógrafo...), anunció medidas de coordinación con la Fiscalía de Siniestralidad Laboral, así como con la Dirección General de Tráfico, la Dirección General de Transportes por Carreteras, Consejerías de Transporte y asociaciones empresariales y sindicatos.
Exceso de horas, la denuncia más numerosa
En la última campaña de vigilancia de camiones y autobuses realizada por la DGT del 10 al 16 de febrero, las denuncias por exceso de horas de conducción fueron las más numerosas, seguidas las infracciones relacionadas con el tacógrafo. Así, de los 19.499 vehículos controlados (4.800 camiones y 120 autobuses) se derivaron 1.976 denuncias por infracciones relativas a los tiempos de conducción (1.953 a camiones y 23 a buses) y 493 por cuestiones relacionadas con el tacógrafo (455 camiones y 38 autobuses). Las denuncias impuestas por exceso de peso y mala disposición de la carga ascendieron a 702, de los cuales 701 fueron a camiones y 1 a buses. Sobre la documentación relativa al vehículo y al conductor los agentes comprobaron que 808 conductores (758 camiones y 50 autobuses) presentaban irregularidades administrativas.