Cómo conducir en un atasco
- Mantenga la vista varios vehículos por delante de usted para anticiparse y reaccionar a tiempo a posibles situaciones de riesgo.
06 abril 2017
Si estas vacaciones de Semana Santa se ve atrapado en una retención, recuerde: su duración no depende de usted; superarla sin complicaciones, sí.
Una retención es un momento ‘anómalo’ en la carretera: de pronto la circulación se detiene sin previo aviso, avanza ‘a tirones’ y cada detención desafía la paciencia de los conductores. Estas son las claves para afrontarlo sin sorpresas:
Distancia de seguridad
Guarde una separación frontal suficiente para frenar sin alcanzar al vehículo que va delante. Es la medida más importante en un embotellamiento: en la distancia está su seguridad.
Para calcularla, tome como referencia un punto fijo en la vía y cuente dos segundos –pronunciando 1101, 1102...– desde que pase el vehículo con el que guardar la distancia hasta que llegue el suyo. Pero si las condiciones meteorológicas son malas o el firme está mojado, prolongue la cuenta hasta los tres o cuatro segundos.
Además, esta separación le dará cierto margen para mantener la distancia con el vehículo que le sigue.
Velocidad
Cuando se apoxime a la retención, adapte su velocidad: deje de acelerar y pise el freno aumentando progresivamente la intensidad sobre el pedal. Así también advertirá a los conductores detás de usted para que también reduzcan la velocidad. Además, consumirá menos combustible y evitará desgastes prematuros de las piezas del embrague.
Dentro el atasco, use el embrague solo cuando sea necesario –antes de detenerse y para reanudar la marcha– y suelte el pedal con suavidad, evitando ‘tirones’. No conviene mantener el embrague pisado y la marcha engranada: desgastará la mecánica innecesariamente.
Al reanudar la marcha, aunque la congestión parezca desvanecerse, ¡mucho cuidado! En esta situación, nunca acelere bruscamente para recuperar tiempo perdido: el atasco puede reaparecer más adelante. En su lugar, acelere un poco menos que el vehículo que va delante: esto le ayudará a mantener la separación y dosificar las frenadas.
Anticipación
Otro recurso útil en las retenciones. Trate de mantener la vista varios vehículos por delante de usted: podrá anticiparse y reaccionar a tiempo para evitar situaciones de riesgo y detenciones innecesarias. Y, por supuesto, nunca pierda de vista al vehículo inmediato.
Observe también los retrovisores regularmente, para tomar medidas ante un posible alcance (advertir con las luces de frenado, aumentar la separación frontal, buscar escapatorias...).
Y recuerde: los comportamientos agresivos como los cambios bruscos de carril y el abuso del claxon no ayudan avanzar y generan nervios en los demás. En un atasco sea paciente, practique la cortesía y el respeto para llegar seguro a su destino.