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¿Influyen los hijos en los padres?
Cogollos se refiere a ellos como “peque- ños guerreros viales”.
DEL DICHO AL HECHO. Sin em- bargo, al examinar los resultados de otra investigación, elaborada por Ip- sos para la Fundación VINCI Autorou- tes, constatamos, como dice el refrán, que ‘del dicho al hecho, hay un buen trecho’.
Este estudio consta de dos partes: una encuesta a más de 1.000 padres y también a sus hijos de 8 a 16 años, y entrevistas a las familias por parte del profesor Daniel Marcelli, especialista en psiquiatría infanto-juvenil. Y, según sus conclusiones, aunque los progeni- tores cambian determinadas prácticas cuando su familia está a bordo del vehí- culo (el 68% suele circular más despa- cio y el 66% se enfada menos al volan- te), no conducen de la manera respon- sable que deberían y a los pequeños esto no se les escapa.
Por ejemplo, el 77% de los adultos re- conoce superar el límite de velocidad y el 65% de los menores ha admitido que sus padres corrían demasiado. El 59% de los conductores reconoce que, a veces, olvida poner el intermitente al girar; un olvido del que se percata también el 59% de los niños. El 22% de
los padres no comprueba sistemática- mente si sus hijos llevan el cinturón abrochado.
Respecto al uso del cinturón de se- guridad, un 11% de los mayores afir- maquenoseloponeasushijosen trayectos muy cor-
“¡Papá, ponte el cinturón!” Los pequeños muchas ve- ces corrigen a los mayores.
transmisión de buenos gestos comien- za a una edad temprana.
AL CRECER, TODO CAMBIA.
tos y el 17% de los menores, entre los 8 y los 11 años, confiesa no ponér- selo en recorridos cotidianos.
Además, un 44%
de los adultos responde al teléfono mó- vil mientras conduce y el 54% de los pequeños lo corrobora. El 31% realiza llamadas al volante (el 44%, si se pre- gunta a los hijos) y el 29% envía o lee mensajes de texto (comportamiento observado por el 34% de los niños). La
El psiquiatra Daniel Marcelli afirma que “el espacio cerrado de un vehícu- lo es un lugar idó- neo para el diálogo padres/hijos”. “Co- mentar la forma de conducir, las nor- mas, las señales de tráfico... todo inte- resa a los niños”, dice Marcelli. Las cosas cambian a
partir de los 12 años.
Para los adolescentes, asegura el
psiquiatra, es el momento de “com- probar si sus padres hacen lo que re- comiendan o justo lo contrario de lo que dicen”.
EL 11% CONFIESA NO PONER EL CINTURÓN A SUS HIJOS EN TRAYECTOS MUY CORTOS
22 Tráfico y Seguridad Vial
Amparo Doménech e Inés Reig
INÉS REIG Y
AMPARO DOMÉNECH
Coordinadoras de Educación Vial en la Jefatura Provincial de Tráfico de Valencia
“El niño puede convertirse en un reeducador para sus padres”
¿Representa la familia un pa- pel crucial?
Sí. Es el primer agente socializador, el más eficaz para lograr la interio- rización de los valores y normas sociales básicas. El papel educador delosmiembrosdelafamilia(padres, abuelos, tíos, hermanos, etc.) se ve reforzadocuandoactúancomoentre- nadores viales, llevando a la práctica un correcto comportamiento.
¿Qué ocurre cuando esto no ocurre así?
En ese caso, lo que aprenda en la escuela, otro importantísimo agente educativo, se va a con- tradecir. En estos casos, el niño, durante la etapa escolar, confron- tará estas distintas realidades y buscará readaptarse a ellas, pudiéndose convertir en un ree- ducador para sus padres.
MAR COGOLLOS
Directora de Aesleme (Asociación para el Estudio de la Lesión Medular Espinal)
“Educamos a los niños y así, a su vez, ellos reeducan a sus padres”
¿Son conscientes los padres de lo importante de su ejemplo? Creo que no son conscientes del todo, aunque sí conducen mejor cuando viaja su familia en el co- che. Se debe seguir trabajando en la concienciación de los adul- tos, muchos siguen pensando: “A mí no me puede pasar”, “Yo con- trolo” y esa sobrevaloración de su experiencia les puede llevar al accidente.
Y, al revés, ¿influyen los niños en sus padres?
En Aesleme trabajamos día a día con niños, desde hace 25 años, y también les enseñamos a reedu- car a sus padres; así se consiguen cambios de conducta: “Papá, el cinturón”, “Móvil, No!”, “Vas muy deprisa”... Pero claro, para esto, es preciso que antes los niños hayan recibido la información adecuada.
ENTREVISTAS