París penaliza a los SUV, los vehículos más grandes

06 febrero 2024

Después de prohibir los patinetes de alquiler en París, le ha llegado el turno a cortarle las alas a los utilitarios más voluminosos, aquellos que pesan más de 1,6 toneladas y que en muchos casos se corresponden con un modelo SUV, el tipo de coche más vendido en este momento en Europa. El 54,55% de los parisinos que se acercaron el 4 de febrero a votar acordaron que para desincentivar la circulación de estos modelos por sus calles era buena idea crear una tarifa de aparcamiento específica (y más cara) sólo para ellos.

El precio de la nueva “tasa SUV” varía de un distrito a otro pero, en líneas generales, triplica las tarifas de aparcamientos actuales pasando de los 4-6 euros por hora a los 12-18 euros con un tope de 225 euros por seis horas de estacionamiento.

A pesar de lo llamativo de la propuesta esta no afectaría a todos los vehículos voluminosos y pesados que ahora mismo circulan por París, ya que existen bastantes excepciones en su aplicación. En principio está pensada para los coches híbridos o con motor térmico cuya masa supere las 1,6 toneladas y para los eléctricos que superen las 2 toneladas.

Pero los residentes de la ciudad, los profesionales que trabajen en París y tengan un pase de aparcamiento autorizado, los taxistas estacionados en las paradas de taxis, los vehículos profesionales (como furgonetas de menos de 3,5 toneladas) que estén registradas como tales o las personas con discapacidad son un ejemplo de algunos de los colectivos que se librarán de la nueva tasa por muy grande o pesado que sea su vehículo habitual. Asimismo, muchos de los propios SUV no la pagarán, ya que no alcanzan el tope máximo de masa permitido (según un informe de WWF el peso medio de un SUV es de 1,3 toneladas).

Por qué a París no le gustan los coches grandes
El Ayuntamiento parisino ha abierto este debate sobre los utilitarios XXL por tres motivos: la capacidad para contaminar de los más grandes, el hecho de que acaparan el espacio público y las dudas que provocan en cuanto a la seguridad vial.

Como ejemplo del primer punto, la delegación francesa de la ONG WWF realizó un informe en el que se afirmaba que de continuar la tendencia actual los SUV supondrían 2/3 de las ventas de coches en Francia, lo cual sería un desastre en cuanto a las emisiones. Según la organización ecologista, este tipo de vehículos emiten hasta un 20% más de gases de efecto invernadero que un coche convencional.

Sobre el segundo punto, otra ONG, Transport & Environment, concluyó tras un estudio que cada dos años los SUV ensanchan una media de un centímetro. Más de la mitad de los 100 modelos de SUV más vendidos en 2023 superan los 180 centímetros de ancho, y algunos de ellos rondan los 200 centímetros. O lo que es lo mismo, ocupan más espacio mientras circulan (con el consiguiente riesgo para motos y bicicletas) y también cuando aparcan.

Y por último, pero más importante, un estudio noruego ya demostró en 2017 que el peso, el volumen y la altura de un vehículo de estas características afecta a la gravedad de las lesiones de un usuario vulnerable en caso de siniestro vial. Los investigadores estimaron que cuando el coche implicado en una colisión con un peatón o un ciclista es de este tipo, el riesgo de morir o sufrir lesiones graves de la víctima se duplica.