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3 BÚSQUEDA DE PRUEBAS. Interviene la Policía Científica:               4 VERIFICACIÓN EN EL LABORATORIO. Los elementos recogidos
         Delitos Violentos examina minuciosamente el vehículo en                –tanto del propio coche como del lugar del atropello– son cotejados por
         busca de pruebas. El coche presenta daños que podrían proce-           el laboratorio de Balística Forense. No hay duda: todos son parte del
der del impacto contra una persona, pero no hay restos biológicos ni   mismo vehículo. El Porsche causó las lesiones mortales. Este informe es fun-
huellas –seguramente habían lavado el coche–. Pero sí encuentran       damental, ya que tiene valor probatorio, corrobora las acusaciones y puede
fragmentos de plástico negro y restos de pintura en el habitáculo.     ser una prueba definitiva si el juez lo toma en cuenta.

ble, porque hay que encontrar un mo-       Efectivamente, el coche presentaba               JUNTAR LAS PIEZAS. La investi-
delo de coche solo a partir de un tro-   importantes daños en un lateral si-
cito muy pequeño de faro o de restos     milares a los producidos en un atro-               gación se acerca a su desenlace. To-
de pintura, consultar bases de datos     pello: capota rajada, faro derecho ro-             das las evidencias, las recogidas en
con miles de modelos de faros, de ti-    to, puerta abollada, y faltaba un re-              Meco y las encontradas en el coche,
pos de pintura...” El deportivo aún      trovisor. “Pero no pudimos asegurar                van a parar a los laboratorios de la
estaba intacto. Era el momento de        que se produjeron a causa de un atro-              sección de Balística Forense de la
ponerle ‘la lupa’ encima y buscar        pello, no encontramos restos biológi-              Policía Científica. “En este caso
pruebas.                                 cos. Probablemente el coche había si-              aportamos la prueba final. En Balísti-
                                         do lavado porque no había ni una hue-              ca encajamos las piezas, como si se
PRUEBAS. La inspección ocular            lla. Y tampoco se había roto el para-              tratara de un puzzle, y después proba-
                                         brisas. Ahí suelen quedan pruebas co-              mos la correspondencia de las lesio-
del vehículo se realiza en el taller     mo pelo o sangre. Con el coche repa-               nes microscópicas en los bordes de ca-
donde estaban a punto de reparar-        rado, poco hubiéramos podido hacer”                da fragmento” explica el inspector
lo. “Hicimos comprobaciones sobre        sostiene Galán. En cambio, sí reco-                Adolfo Busta.
la identidad del titular. El sujeto ha-  gieron fragmentos de plástico negro
bía puesto una denuncia después del      y pintura, que a la postre serían deci-              Así, este estudio de trazas –como
atropello para exculparse”, cuenta       sivos. La otra mitad del jarrón roto.              se conoce esta especialidad de Balís-
María Jesús Galán, jefa de la Uni-                                                          tica– es importantísimo porque de-
dad de Delitos Violentos. Según              Retrovisor hallado en el lugar del atropello.  muestra científicamente que el retro-
Galán, el interrogatorio del propie-                                                        visor y los trozos de faro coinciden
tario fue bastante revelador pues                                                           con el coche sospechoso. Dicho in-
basó su defensa en incoherencias                                                            forme estará a disposición del juez
que terminaron descubriéndole. El                                                           durante el juicio y, si lo toma en
inculpado reconoció haber estado
en el lugar de los hechos, pero no el                                                               consideración, se constituirá
atropello, alegando que no se detu-                                                                         en una prueba de cargo
vo porque pensó que “era un obje-                                                                                contra en presunto
to, no a una persona” y que “había                                                                                  culpable. “En el
poca visibilidad por la niebla”. Un                                                                                   caso de Meco,
punto éste desmentido en el infor-                                                                                    no hay dudas
me de la Policía de Alcalá, que es-                                                                                   –afirma Adolfo
tablece que aquella noche la visibi-                                                                                Busta–: ese vehí-
lidad era perfecta: no había niebla                                                                                culo estuvo en el
y la vía estaba bien iluminada.                                                                                lugar del atropello y a

                                                                                                        él corresponden los frag-
                                                                                            mentos recogidos en dicho lugar”. ◆

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