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OPINAN LOS LECTORES EN NUESTRA WEB JOSÉ PÉREZ TIRADO
¿Qué le parece la condena
de dos años y medio de
cárcel a Ortega Cano?
SUFICIENTE EXCESIVA
La Sección Primera de la Audiencia
3,3% 1%
INSUFICIENTE
95,8%
José Ortega Cano. BARTOLOMÉ VARGAS
EUGENIA DOMENECH “Los fiscales proponemos
una respuesta penal
“La condena es casi proporcionada”
un insulto”
El caso que nos ocupa es un supuesto de homicidio
Desde P(A)T queremos mostrar en primer imprudente del art 142 con delitos previos de los
lugar nuestra solidaridad con la familia arts. 379 y 380 (conducción bajo la influencia de al-
de Carlos Parra, las auténticas víctimas cohol y conducción temeraria), sancionado con pena de
de este caso, pedir más respeto para las vícti- 2 años y medio a 4 de prisión y 3 años y medio a 6 de
mas en general por parte de todos y que se privación del permiso de conducir (art 382). Es después
cumplan nuestras leyes y las sentencias que del delito de conducción con manifiesto desprecio y re-
dictan nuestros Tribunales de Justicia. sultado de muerte (arts 381 y 138 CP), el de mayor gra-
Dicho esto, nos parece que el Código Penal es-
tablece penas demasiad “tibias” y que no se vedad dentro de los delitos via-
les. El bien jurídico protegido es
corresponden con el da- el derecho fundamental a la vi-
ño causado y la gravedad da. Hay una cifra elevada de pro-
de estas conductas. La cedimientos por hechos simila-
condena al Sr Ortega Ca- res que no acceden a los medios
no es por homicidio im- de comunicación. En ellos, el Fis-
prudente, conducción te- cal actúa como en este, impul-
meraria y delito contra la sando una investigación en pro-
seguridad vial por alco- fundidad y pronta de los hechos,
holemia y consiste en so- ejercitando las acciones penales
lo 2 años y 6 meses de y velando por los derechos de las víctimas. Dictada
prisión, habiendo matado sentencia, solicitando su cumplimiento efectivo, con in-
a una persona, el Sr Carlos Parra y condenado greso en prisión y oponiéndose al indulto cuando se
a su familia. Nos parece casi un insulto que solicita. La cifra de internos por delitos de esta índole
esa sea la pena por quitarle la vida a una per- es asimismo relevante. En definitiva, los Fiscales pro-
sona. Pero, además, bajo la excusa de que es mueven con estas actuaciones una respuesta penal
un “accidente” que le puede pasar a cualquie- proporcionada, disuasoria y rehabilitadora tendente a
ra, se intenta eludir una clara responsabilidad, cumplir los fines de las normas penales. En primer lu-
cuando en realidad se trata de un accidente gar la prevención general, evitando futuros atentados a
anunciado. la vida en el tráfico viario y de otra parte la prevención
Esperamos que se cumpla la condena y no especial promoviendo la corrección y recuperación pa-
se otorgue el indulto solicitado, máxime ra la sociedad, como ciudadano cumplidor de las nor-
cuando no ha mostrado ningún arrepenti- mas de tráfico, del autor de ellos.
miento, ni ha reconocido lo “inadecuado” de
su conducta, ni ha pedido perdón a la fami- Fiscal General de Seguridad Vial
lia de Carlos Parra.
Nº 224 / ENE-FEB / 2014 23
Directora de P(A)T
Abogado. Representante de las Asociacio-
nes de Víctimas en la Reforma del Sistema
de Indemnizaciones
“Una gran
irresponsabilidad
que merece
reproche penal”
Provincial de Sevilla ha realizado en
su Sentencia un profundo estudio
jurídico para aplicar al acusado, José
Ortega Cano, con absoluto acierto, la
condena como autor de un delito contra
la seguridad vial en su modalidad de
conducción bajo la influencia de bebi-
das alcohólicas.
La importancia de esta sentencia radi-
ca en anular y
modificar el crite-
rio de la Juez de
Primera Instancia
del Juzgado Penal
nº 6 de Sevilla,
que no había da-
do validez a la
prueba de alcoho-
lemia alegando
dudas difusas so-
bre que la analítica pudiera correspon-
der a Ortega Cano. Si se hubiera man-
tenido la tesis del Juzgado de lo Penal,
cualquier reo que manifestara unas
“supuestas deficiencias” en la cadena
de custodia de una analítica de sangre,
le bastaría para anular la prueba y con-
seguir la absolución.
Realizar un último apunte, que merece-
ría otro comentario distinto, sobre las
indemnizaciones fijadas en sentencia,
que son absolutamente insuficientes y
obsoletas, y que por ello, resulta nece-
sario y muy urgente que se realice en
España una reforma inmediata del Sis-
tema de Indemnizaciones a las Vícti-
mas de los Accidentes de Tráfico, pues
son cuantías ridículas y escasas las
que se fijan en nuestra actual legisla-
ción por la pérdida de una vida humana
y por el daño moral y patrimonial que
para una familia representa la pérdida
de un ser querido, y en este accidente
de un respetable cabeza de familia.
La Justicia ha dejado muy claro que
José Ortega Cano era temerario en su
conducción, que ponía en riesgo la vi-
da de cualquier ciudadano que co-
rrectamente circulara por aquella ca-
rretera, y que, además, conducía bajo
la influencia de las bebidas alcohóli-
cas, y que su gran irresponsabilidad
merece el reproche penal que le ha
sido aplicado y su ingreso inmediato
en un Centro Penitenciario.