AstaZero, el laboratorio de Volvo
- Este circuito, el primero del mundo a gran escala, servirá como lugar de investigación y desarrollo tanto de tecnologías de seguridad como de conducción autónoma
26 agosto 2014
Se encuentra en el oeste de Suecia, próxima a la sede de Volvo, se llama AstaZero (Active Safety Test Area) y es el primer campo de pruebas del mundo a gran escala. Este circuito, de más de 2 millones de metros cuadrados, de los cuales 250.000 están pavimentados, está rodeado por una autopista de 5,7 kilómetros, y reproduce varios escenarios: una zona urbana de nueve manzanas, con todo tipo de cruces, rotondas y señales de tráfico, sin olvidar detalles como las fachadas de los edificios; una zona de carreteras secundarias en un entorno rural, con diversos cruces que ponen a prueba las reacciones del vehículo ante la aparición de obstáculos o animales; una zona de carretera de varios carriles, donde se prueban los cambios de carril y las situaciones de colisión y cruce, y unida a esta, una zona de alta velocidad en el centro de las instalaciones, con dos vías de aceleración de un kilómetro donde se pone a prueba la dinámica del vehículo a altas velocidades.
Conducción autónoma y objetivo "Cero víctimas"
AstaZero, el banco de pruebas de Volvo Cars, servirá como lugar de investigación y desarrollo tanto de tecnologías de seguridad como de conducción autónoma, buscando evitar accidentes gracias a sistemas avanzados que además controlan la fatiga o el nivel de atención en el conductor. Un conductor está a los mandos de los vehículos en las diversas pruebas, mientras que las situaciones que impliquen situaciones de tráfico complejas o altas velocidades, serán robots los que se encarguen de tomar los mandos. Solo es el principio de más proyectos de investigación en innovación en vehículos.
Volvo Cars sigue trabajando en su objetivo de alcanzar la cifra de cero muertos y heridos graves dentro de sus coches para el año 2020. Para ello sigue en su camino hacia el coche autónomo, con su proyecto Drive Me, en el que el fabricante sueco comenzaba las pruebas con sus prototipos autónomos por las calles de Gotemburgo. Otro de los objetivos, además del de las cero víctimas, era aplicar el proyecto con conductores reales en 2017.
Volvo Cars continúa apostando por su idea y proyecto de coche autónomo. Y lo ha hecho comenzando las primeras pruebas de sus modelos sin conductor en los alrededores de la ciudad sueca de Göteborg, enmarcados dentro del proyecto "Drive Me". Este plan de la marca sueca, que surge en colaboración con las administraciones públicas de transporte de Suecia y la ciudad de Göteborg, pasa por lanzar 100 Volvos autónomos en 2017 que utilizarían conductores reales en todas las condiciones que se produzcan en un entorno tan exigente como la segunda ciudad más importante del país escandinavo.