“Aprovechar la convalecencia para cambiar hábitos”
- Esta prevención secundaria puede reducir la reincidencia en casi un 50%
30 octubre 2014
En España no se escatiman medios para la recuperación de los pacientes después de un accidente de tráfico (servicios de emergencias, unidades de cuidados intensivos, intervenciones quirúrgicas complejas, fármacos, hemoderivados etc.). Sin embargo, desde un punto de vista asistencial, un aspecto totalmente olvidado es el control de los factores de riesgo y que en la mitad de los casos suele ser el consumo de alcohol y drogas. Como en cualquier patología, si no se controlan los factores de riesgo, ésta volverá a repetirse. De hecho, la reincidencia de los traumatizados asociados a alcohol y drogas es muy alta. Es necesario identificar los factores de riesgo y si se detecta asociación con estas sustancias, se deben aplicar acciones de prevención secundaria mediante Intervención motivacional. Esta prevención secundaria puede reducir la reincidencia en casi un 50%.
La intervención motivacional pretende inducir cambios en el comportamiento, lo cual siempre es una tarea complicada, en particular en ámbitos relacionados con el consumo de estas sustancias. A veces, es necesario una crisis o una situación de conflicto que haga reflexionar sobre los riesgos de una determinada conducta. Sin duda, la situación de convalecencia tras un accidente de tráfico supone una circunstancia que hemos de aprovechar para el cambio de hábitos. En este sentido, los hospitales constituyen una oportunidad extraordinaria que con frecuencia se desaprovecha.