Medidas contra el alcohol al volante
- El 11% de las muertes en accidente en Europa fueron por alcohol
15 septiembre 2020
En contra de lo que pueda parecer, España no está entre los primeros países de Europa en consumo de alcohol. El top 10, según un estudio de la Organización Mundial de la Salud (OMS), lo ocupan Lituania, Bélgica, Austria, Bulgaria, Francia, Luxemburgo, Alemania, Irlanda, Polonia y Reino Unido. Nuestro país se sitúa en la mitad de la tabla, superando a Italia y Hungría y, eso sí, por encima de la media europea.
Jesús Román, nutricionista y presidente de la Fundación Alimento Saludable, considera que, en nuestro país, una práctica muy ligada a la cultura mediterránea da preferencia a las bebidas fermentadas como el vino (18%) y la cerveza (54% de los casos).
Consumo de alcoho el jóvenes
Aunque, advierte Román, la ingesta de alcohol destilado (28%) está creciendo, en especial entre los jóvenes españoles, un fenómeno común en todo el continente. La OMS estima que entre chicos y chicas de 15 a 19 años, el mayor consumo de alcohol se registró en Europa en 2016, un 44% de menores. En particular los menores “no deben consumir alcohol, ya que su organismo y personalidad no están totalmente desarrollados”, dice Pilar Campos, subdirectora General de Promoción de la Salud, en el Ministerio de Sanidad. Además de consecuencias para la salud, el riesgo de sufrir un accidente de tráfico se triplica en tasas muy bajas de concentración de alcohol en sangre (entre 0,15 y 0,5 g/l).
El Consejo Europeo de Seguridad en el Transporte (ETSC) está llevando a cabo su particular cruzada contra el alcohol al volante en Europa, y ha elaborado un informe que parte de la premisa de que si todos los conductores europeos hubieran circulado sobrios en 2018, se podrían haber salvado 5.000 personas.
Registro de datos
25.150 personas murieron en este año, en 2018, en un siniestro vial. Alrededor de 2.654 fueron a causa del alcohol (un 11%). Sin embargo, esta cifra podría ser superior , puesto que, y este es uno de los principales problemas, el registro de datos no es igual en todos los países. Solo Austria, Chipre, Alemania, Dinamarca, Francia, Croacia, Portugal, Polonia y Suiza realizan la prueba de alcohol a todos los implicados en accidentes de tráfico. En España, por ejemplo, la prueba de aliento se realiza –siempre que lo permita el estado del conductor– a ciclistas y conductores de vehículos. Pero cuando las pruebas se realizan en hospitales, los datos no siempre son comunicados a la policía debido a la protección de datos. En Irlanda se aplica a todos, salvo a peatones. En Serbia, hasta 2016, esta información no se registraba. Y en la actualidad es el oficial de policía quien determina si el alcohol fue o no causa determinante en un accidente.
Tasa cero
Por si esto no fuera suficiente, no todos los países aplican los mismo límites de concentración de alcohol en sangre. Esto supone que un peatón muerto por un conductor con 0,3 g/l de alcohol se considera muerte por conducir en estado de embriaguez en Polonia, donde el límite de concentración legal es 0,2 g/l para todos los conductores, pero no en Francia, donde el límite es 0,5 g/l. Recordemos que en España la tasa es de 0,3 g/l para noveles y profesionales y de 0,5 g/l para el resto de conductores. El ETSC recomienda que todos los países adopten una tasa cero, es decir, hasta un máximo de 0,2 g/l. Solo nueve cumplen con esta medida: República Checa, Hungría, Rumanía, Eslovaquia, Estonia, Polonia, Suecia, Noruega y Serbia.
Europa es el continente donde más cerveza se consume del mundo. Los mayores consumidores viven en República Checa (casi 140 litros por persona), Austria y Alemania (que superan los 100). Los españoles (48 litros por personas) estamos entre los que menos. En cambio hay algo en lo que somos únicos: somos los mayores consumidores y productores de cerveza "sin" del mundo.
Dos de cada tres jóvenes de 14 a 18 años ha bebido alcohol en los últimos 30 días, según la encuesta ESTUDES. El 22% ha experimentado alguna borrachera en este período y el 32% ha realizado un consumo “en atracón” o intensivo (lo que se conoce como “hacer botellón”). Y, a pesar de que en el consumo general de alcohol, los hombres beben cuatro veces más que las mujeres, en esta franja de edad, el 68% de las chicas afirmaron haber bebido, frente al 66% de los chicos.
El Observatorio Nacional de Seguridad Vial de la DGT (ONSV) ha realizado un estudio sobre Violencia Vial en el que detectó en 2017 que el 11% del total de accidentes de tráfico (2.796) y un 30% de fallecidos (326) se atribuyen al alcohol. De estos fallecidos, un 38% fueron terceros y un 27% tenían una concentración de alcohol en sangre muy alta (más de 1,2 g/l). “Son pocos, pero beben mucho y hacen mucho daño”, resume Álvaro Gómez, director del ONSV. Antonio Alonso, Director Nacional del Instituto de Toxicología y Ciencias Forenses, corrobora que 142 conductores de un total de 535 fallecidos en 2018 en accidente de tráfico a los que se les realizó la autopsia, dieron positivo. “El 71% con una tasa muy alta, igual o superior a 1,2 g/l”, asegura Alonso.
Reino Unido, exceptuando Escocia con una tasa de 0,5 g/l, tiene la tasa de alcoholemia permitida más alta de la UE, 0,8 g/l, y de las cifras más bajas de fallecidos por millón de habitantes. Su secreto está en que aplica sanciones durísimas. La primera vez que un conductor es detectado con más alcohol del permitido puede llegar a pagar 4.500 euros de multa y podrá perder de 3 a 11 puntos del permiso (casi sin puntos solo en la primera sanción). Pero, no es todo. Además, tanto la compañía con la que tenga contratado su seguro del coche como la empresa que le tenga en nómina tendrán conocimiento de la multa, lo que podría repercutir en la prima del seguro o en su situación laboral. Y si fuera sorprendido una segunda vez en los siguientes 10 años sería considerado reincidente (no dentro de los tres siguientes años, como ocurre en España). En este caso, se le retira el permiso hasta 3 años y no podrá recuperarlo sin pasar un examen médico.