Peligro a ráfagas
- Cada invierno se producen más de 170 accidentes a causa del fuerte viento racheado
23 diciembre 2013
El viento suele ser un incómodo y, en ocasiones, peligroso compañero de viaje porque puede empujar nuestro coche y desviarlo de su trayectoria cuando surge de improviso a la salida de un túnel, al salir de una trinchera o una zona protegida, o simplemente al adelantar a vehículos pesados o al cruzarnos con ellos.
Riesgos
Cuando el viento viene desde la izquierda, el empuje se interrumpirá instantáneamente al cruzarnos con otro vehículo y nuestro coche tenderá a desplazarse primero hacia ese lado y, bruscamente, hacia la derecha. Si viene de la derecha y adelantamos a un vehículo voluminoso sufriremos el llamado efecto 'pantalla' al llegar a su altura y rebasarlo (ver recuadro).
Cómo actuar
En primer lugar, observe la vegetación, los árboles, las mangas de viento o si hay polvo o materiales arrastrados para valorar de dónde sopla el viento y su intensidad. Conduzca más despacio, a una velocidad que le permita dominar siempre el vehículo y utilice una marcha más corta para tener mayor respuesta del motor. No haga movimientos bruscos con el volante que puedan originar bandazos: sujete el volante firme con ambas manos y ofrezca con él la suficiente resistencia contra el viento para mantenerse en su carril.