Aprender transformando la sociedad
- El ApS es una metodología de especial relevancia para conectar el currículo con la realidad social.
18 diciembre 2025
La Educación Vial ha avanzado y ampliado horizontes para consolidarse como un pilar esencial de la convivencia democrática. No se trata únicamente de evitar siniestros viales, sino también de promover una cultura de respeto, empatía y entendimiento entre quienes comparten un mismo espacio público.
Aprendizaje práctico. En este sentido, una buena práctica pasa por utilizar la metodología del aprendizaje-servicio (ApS) porque se ha consolidado como un método pedagógico relevante para conectar el currículo con la realidad social. Pasaríamos de crear situaciones de aprendizaje artificiales llevadas al aula, a transportar al alumnado a otros lugares en la vida real en los que el docente lo guíe. Entre los ámbitos donde esta metodología demuestra un potencial especialmente transformador se encuentra la Educación Vial, un campo que requiere una mirada integral orientada a la convivencia y la corresponsabilidad.
El ApS es una propuesta educativa que une procesos de aprendizaje con el servicio a la comunidad. El alumnado aprende trabajando sobre necesidades sociales del entorno más cercano con el objetivo de mejorarlo. En este marco, el aprendizaje deja de circunscribirse al aula y se proyecta en el territorio, implicando al alumnado en proyectos útiles para sus necesidades educativas y generando impacto social. Para la Educación Vial, el aprendizaje-servicio permite superar una visión meramente normativa o sancionadora del tráfico para abordarlo desde una perspectiva significativa e integradora. Aporta una dimensión práctica y comunitaria difícil de alcanzar con metodologías convencionales.
Permite al alumnado detectar necesidades reales de su entorno –como puntos peligrosos, problemas de accesibilidad o comportamientos de riesgo– y abordar estos retos con sentido y motivación. A través de estas experiencias, los estudiantes desarrollan valores en primera persona y no desde la teoría. Además, el ApS fomenta la implicación de toda la comunidad educativa y de agentes externos como ayuntamientos, policías o la propia DGT, lo que genera redes de colaboración. El impacto de estos proyectos se concreta en acciones reales: campañas informativas, mapas de rutas seguras, materiales para vulnerables o propuestas para un uso responsable de los vehículos de movilidad personal (VMP), contribuyendo de forma directa a una mejor convivencia.
En un contexto de movilidad urbana diverso y cambiante, el ApS facilita una comprensión más profunda de la normativa vial y su necesidad de adaptación continua. El alumnado conoce y analiza críticamente la normativa, propone mejoras y se familiariza con los textos legales y los sistemas de participación ciudadana. Esto le permite interiorizar las normas no como una imposición, sino como una herramienta para garantizar el bienestar colectivo y la convivencia.
Los beneficios del aprendizaje-servicio son numerosos tanto para los estudiantes como para la sociedad. A ellos les sirve para mejorar la adquisición de competencias clave, la autonomía, la autoestima y la capacidad de trabajo colaborativo, además de favorecer hábitos de movilidad segura y responsable. En la comunidad, estos proyectos ayudan a reducir comportamientos de riesgo, promueven la movilidad sostenible, mejoran la accesibilidad y generan redes estables de cooperación interinstitucionales. No obstante, su implementación plantea ciertos retos como, por ejemplo, la necesidad de una mejor formación docente en metodologías ApS y Educación Vial. La falta de coordinación interinstitucional y la dificultad de evaluar el impacto social de los proyectos son otros obstáculos. Superarlos exige una apuesta decidida por parte de los centros, las Administraciones y la comunidad educativa.

Toledo
CEIP Nuestra Señora de la Blanca. Pulgar
A través del 'Taller de pinchazos', desarrollado con apoyo de la Jefatura Provincial de Tráfico de Toledo, se ha enseñado al alumnado de 6º de Primaria nociones básicas de reparación y mantenimiento de bicicletas. Posteriormente este alumnado compartió sus nuevos conocimientos formando a sus compañeras y compañeros de 3º y 4º.
Santa cruz de Tenerife
IES Las Galletas. Arona
El proyecto 'Pedaleando por una movilidad sostenible', en el que participa la asociación Cronotopo, fomenta la educación vial y el trabajo colaborativo en el alumnado de 2º del Ciclo Formativo de Técnico Superior en Enseñanza y Animación Sociodeportiva. Entre los objetivos de aprendizaje se encuentra diseñar una ruta urbana ciclista en el entorno cercano al IES además de adquirir conocimientos en normativa, reparación y mantenimiento básico de bicicletas. Este proyecto contribuye al Programa STARS de DGT, que impulsa desplazamientos activos y sostenibles entre el alumnado.

Zamora
Centro Menesiano Zamora Joven
Con el proyecto “Vehículo seguro, conductor seguro”, estudiantes de 2º del Ciclo Formativo de Grado Básico de Mantenimiento de Vehículos realizan en plena calle revisiones gratuitas a los patinetes eléctricos. Posteriormente envían por correo electrónico un informe con la valoración general. Conjuntamente, la Jefatura Provincial de Tráfico de Zamora instala una mesa informativa sobre normativa y consejos de seguridad específicos para VMP.

Madrid
IES Antonio Gaudí. Coslada
El proyecto “Biciestética” une dos realidades vulnerables: por un lado, la de personas con diversidad funcional y, de otra parte, la del alumnado de peluquería y estética del aula de compensación educativa del IES Antonio Gaudí, alumnado en riesgo de exclusión social. Las personas estudiantes de peluquería y estética se desplazan hasta el Centro Ocupacional de ASPIMIP en bicicleta y, para ello, reciben clases teóricas y prácticas por parte de la Policía Local de Coslada. Una vez allí, realizan sesiones de peluquería, estética, manicura, etc., con alumnado del Centro Ocupacional.





