“Tolerancia Cero con el alcohol y las drogas”

05 febrero 2018

Javier cambió la pelota por los patines de cuchillas y la cancha por la pista de hielo. Y este madrileño lo ha hecho tan bien que ha colocado a España en lugar destacado del difícil y sacrificado deporte del patinaje artístico, el patinaje sobre hielo. Todo gracias a logros y éxitos tales como ser siete veces Campeón de España; seis, Campeón de Europa; y dos, Campeón del Mundo y 4º (diploma olímpico) en los Juegos de Invierno de 2014. Sus objetivos para 2018 son un sexto Campeonato de Europa consecutivo, obtener una medalla olímpica, de oro a ser posible, subir al podio en el Mundial y… sacarse el permiso de conducir.

Antes de los Juegos de Pyeongchan, en el Europeo obtuvo el sexto título…
Quería el sexto oro consecutivo para escribir un capítulo aún más amplio en la historia del patinaje artístico. Reconozco que soy muy exigente conmigo mismo y que, a medida que se acercan los Juegos Olímpicos, aumenta la presión. Pero para contrarrestarla lo mejor es entrenar y trabajar a tope.
El nivel del patinaje ha subido mucho...
Así es. Poco a poco fuimos introduciendo más dificultad en los programas y se ha disparado tanto, que parece que ahora no hay control. Los jóvenes patinadores cada vez arriesgan más, crean cosas nuevas en la coreografía y, sobre todo, saltos más difíciles. Hasta hace poco los triples eran ‘lo más’, y desde hace pocas temporadas ya se habla y se ve son varios cuádruples en los programas.
¿Por qué se decanta?
Lógicamente, incluyo cuádruples en mis programas, pero doy mucha importancia a la coreografía. Prefiero programas totalmente limpios y sin fallos, pese a que tengan menos dificultad y que expresen bien la historia planteada, como el de “Tiempos Modernos de Chaplin” para el corto y “El hombre de la Mancha” para el largo. Dos programas estupendos, muy difíciles, con mucha variación de música y mucho potencial. Además son un compendio de otros programas de mi carrera.
 

La seguridad parece muy importante para usted en la pista de hielo y en la carretera.
Correcto. Hablamos de cosas muy importantes como son las competiciones, pero también las carreteras. Todavía no tengo carné de conducir, que es algo que me he planteado para este verano ya que con 26 años creo que ya toca. Pero como ya he dicho, las competiciones que me esperan este primer trimestre –Europeo, Juegos y Mundial–, son súper-importantes y hay que trabajar mucho en los entrenamientos, pulir muchas cosas para conseguir medallas en las tres citas, que es lo que me he propuesto. No es fácil. Podemos alcanzarlo, pero vamos a necesitar mucho trabajo y esfuerzo.
Hablando de seguridad, ¿cómo valora la utilización del cinturón de seguridad en los coches?
Es esencial. Es algo que nos han enseñado e inculcado desde pequeños nuestros padres y a través de las campañas informativas y publicitarias. Es algo esencial en nuestra seguridad en la carretera, porque en cualquier momento puede producirse un accidente y, aunque estemos muy seguros de nosotros al volante, nunca es demasiada la precaución. El cinturón de seguridad es algo que debe uno ponerse de forma instintiva nada más subir al coche y no quitárselo hasta que finalice el trayecto.
¿Qué diferencias observa en la conducción y el tráfico en Canadá, donde vive, con España?
Es muy diferente. Allí están acostumbrados a coches automáticos y aquí la mayoría son manuales, y las carreteras son más anchas ya que tienen más espacio; pero al fin, la conducción es algo de cada persona según sea más prudente o más arriesgada como en todo el mundo. Lo que se puede pedir es que todos tengan más precaución, que sepan que no están solos en carretera, que hay otros automóviles, motos, camiones, autobuses; por lo que debemos pensar no solo en nosotros y nuestra seguridad, sino también en la de los demás.