Cinco razones para reciclar neumáticos
- Cada año quedan fuera de uso unos 1.000 millones de neumáticos en todo el mundo
05 junio 2020
Cada neumático de tipo medio que se recicla evita la emisión de 32,8 kg de C02 y el consumo de 10,5 litros de petróleo. Este es el cálculo que han realizado en la Universidad Miguel Hernández de Elche (Alicante) y que TNU (la sociedad de Tratamiento de Neumáticos Usados) subraya para concienciarnos sobre lo importante que es reciclar las ruedas usadas de los vehículos.
Con motivo del Día Mundial del Medio Ambiente, que se conmemora el 5 de junio bajo el eslogan "La hora de la naturaleza", TNU nos da cinco razones para reciclar los neumáticos fuera de uso, ya que ese gesto contribuye a conservar los ecosistemas y a frenar el calentamiento global.
Ahorro de energía y lucha contra el cambio climático
Según los cálculos de la Universidad Miguel Hernández, la actividad de TNU ha permitido reciclar casi 700.000 toneladas de neumáticos usados. De esta forma, se han dejado de emitir a la atmósfera más de 3.000 millones de toneladas y se han ahorrado casi 1.000 millones de litros de petróleo y más de 80.000 millones de litros de agua.
Reutilizar los neumáticos usados conlleva una disminución de la extracción de materias primas y un menor consumo de energía, por lo que se reduce la emisión de gases de efecto invernadero y se contribuye en la lucha contra el cambio climático.
Menos materias primas
El caucho, natural o sintético, es el principal material de los neumáticos. De hecho, el 60% de la producción de esta industria se dedica a la fabricación de ruedas. Al contrario de lo que pueda pensarse, obtener caucho natural tiene un fuerte impacto medioambiental, ya que se extrae, después de la tala, de un árbol que crece en los bosques tropicales. De hecho, esa repercusión en el ecosistema ha obligado a que el caucho natural solo represente el 30% de la producción total de caucho. Si reciclamos, utilizamos menos recursos naturales y contribuimos a proteger los bosques y las selvas, que siguen siendo los pulmones del planeta.
Nuevos productos
TNU gestiona los neumáticos usados. Primero, los clasifica entre los que pueden renovarse (con un proceso de recauchutado) y los que no. Estos últimos finalmente son llevados a una planta de reciclado, donde se separan los diferentes elementos (caucho, fibra textil y acero) y se destinan a un nuevo uso. Entre otros usos, están asfaltado de calles y carreteras, losetas de seguridad y pavimentos para parques infantiles, canchas deportivas, guardarraíles, césped artificial, aislantes acústicos, tejados, etc.
Empleos y economía circular
Hace tiempo que en España se apostó por reciclar los neumáticos usados al aprobarse una gestión integral de los mismos. En este contexto, surgieron iniciativas con TNU, que recogen y garantizan un adecuado tratamiento a las ruedas que ya no sirven de una forma ecológica y responsable. Se trata de un proyecto de economía circular que genera nuevos puestos de trabajo, evita que se consuman materias primas y respeta el medio ambiente.
Protección del medio ambiente y la biodiversidad
Cada año, quedan fuera de uso unos 1.000 millones de neumáticos en todo el mundo, lo que representan un problema para el medio ambiente. Si se abandona una rueda, puede tardar hasta 1.000 años en degradarse. Además, en ese proceso puede contaminar el suelo de restos químicos, que podrían llegar a las aguas, los animales y la vegetación.
A veces, se opta por quemar esos neumáticos viejos, pero esa opción es aún más peligrosa, ya que durante el proceso se emiten gases tan tóxicos como el ácido sulfúrico.
La marca de neumáticos Continental, aprovechando la celebración del Día Mundial del Medio Ambiente, nos recuerda la importancia de cuidar de forma correcta las ruedas de nuestro vehículo, ya que también eso tiene un impacto medioambiental.
Según señalan, más del 20% del consumo del vehículo depende de los neumáticos. Por eso, si no tienen la presión adecuada, puede incrementarse el gasto de combustible hasta el 3%. Además, las ruedas que llevan la presión baja pierden pequeñas piezas de su estructura al rodar, que acaban contaminando el medio natural.
Importante, las etiquetas
La Unión Europea aprobó la obligatoriedad de la Etiqueta Europea del Neumático. Dicha etiqueta, que clasifica las ruedas de A a F, proporciona información sobre sus características, impacto en el medio ambiente y seguridad al rodar.
Es muy importante saber leer esas etiquetas porque, de hecho, establecen tres criterios (consumo de combustible, prestaciones de frenado en superficie mojada y nivel de ruido exterior) que afectan directamente a la seguridad vial, la contaminación y el ahorro de combustible. Según Continental, entre elegir un neumático clasificado A a uno con F puede conllevar un ahorro de hasta 300 euros en su vida útil.
