Hidrógeno, el combustible del futuro
- Produce dos o tres veces más energía que la mayoría de los combustibles que se utilizan habitualmente
22 junio 2018
Un automóvil de hidrógeno es un coche eléctrico que fabrica a bordo su propia electricidad cuando el hidrógeno reacciona con el oxígeno del aire en una mini-central llamada pila de combustible. ¿Lo mejor? Que por el tubo de escape sólo sale agua.
El momento oportuno de este gas está llegando de la mano de algunos fabricantes asiáticos que llevan años trabajando, convencidos de que en el hidrógeno está el futuro de la movilidad y han sido los pioneros.
Hoy son legión las marcas que trabajan en el desarrollo de modelos de pila de combustible, azuzados por la presión de los gobiernos debido al calentamiento global y animados porque se ha conseguido reducir el coste de las pilas de combustible hasta en un 95%. En el sector automovilístico, de 10 a 15 millones de turismos y unos 500.000 camiones podrían circular alimentados por hidrógeno en el año 2030 en todo el mundo.
Más eficaz.
El hidrógeno es el combustible más eficaz, puesto que tiene una relación poder calorífico/peso más alta que cualquier otro combustible. Produce de dos a tres veces más energía que la mayoría de combustibles que se usan habitualmente, y reacciona rápidamente con el oxígeno.
Las cifras, aunque quizás demasiado ambiciosas, escenifican un futuro prometedor. En Alemania, por ejemplo, el objetivo es llegar en el año 2025 a 500.000 vehículos de hidrógeno circulando, más de 500 hidrogeneras funcionando. Francia tendrá más de 100 estaciones en 2020. En España está previsto que se pase de los seis puntos de carga actuales, a veinte antes de 2020, formando el denominado Corredor del Hidrógeno entre España-Andorra y Francia.
Honda ya trabajaba en la pila de combustible en los 80 y en 2008 comenzó a vender en muy pequeñas series su “FCX Clarity” en los EE.UU. y Japón. Hyundai comercializó hace dos años su todocamino “ix35 Fuel Cell” en series más grandes, incluidos 60 taxis para la ciudad de París (Francia). Sin embargo, y hasta ahora, por cuestiones de precio, poca demanda y ausencia de red de hidrogeneras, pocos fabricantes atrevían a lanzar grandes series para vender en cualquier mercado. Ahora la oferta crece por momentos. En Japón y EE.UU. muchos de estos modelos se venden a particulares, pero la idea de casi todas las marcas en Europa es, al principio, vender estos modelos en régimen de leasing a organismos públicos y empresas que tengan una propia hidrogenera.
En 2003 ya circulaban por algunas ciudades españolas autobuses movidos por hidrógeno. Eran modelos en pruebas y la verdad es que no tuvieron mucho éxito pero sirvieron para demostrar que, sometidos a un profundo desarrollo, tarde o temprano serían rentables. Ahora, Toyota anuncia la comercialización del autobús “Sora1”, y espera que más de cien unidades circulen en Tokio (Japón), antes de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de 2020. Está equipado con un dispositivo de alimentación externo de gran capacidad, y se puede utilizar como fuente de alimentación de emergencia en caso de catástrofe. Dos motores eléctricos y diez depósitos de hidrógeno componen su parte técnica.