Peaje para circular por Manhattan
- Un estudio determina que a la ciudad de Nueva York la congestión le costará, los próximos 5 años, 100.000 millones de dólares
10 abril 2019
Acceder en coche a los barrios más concurridos de Manhattan (en Nueva York) –desde 60th Street en Midtown hasta The Battery–, costará como máximo una tasa de 11,52 dólares (unos 9 euros) por viaje. Este arancel está incluído en el nuevo plan presupuestario que ha aprobado el gobernador Andrew M. Cuomo. Con esta medida, Nueva York se convierte en la primera ciudad estadounidense en aplicar un impuesto de congestión similar al que ya existe en Londres, Singapur o Estocolmo. Se espera con esta medida recaudar dinero suficiente para financiar mejoras en el metro y reducir los atascos.
Implantación de las tasas
Se espera que comiencen a aplicarse estas tasas en 2021, aunque aún no se ha decidido la cantidad real (que podría rondar entre los 12 a 14 dólares por coche y cerca de 25 dólares por camión). El plan propuesto por el gobernador determina que Triborough Bridge and Tunnel Authority (TBTA) sea el organismo encargado de gestionar el cobro.
¿Todos pagan?
Los legisladores están planteándose aplicar excepciones a conductores que acrediten bajos ingresos, a personas con discapacidad o necesiten asisitr a citas médicas. Los conductores que viven en la zona de congestión no pagarán si circulan dentro de la zona de congestión y podrán pagar una tarifa reducida por entrar o salir de esta zona.
Funcionamiento
El sistema de cobro se realizará a través de un peaje electrónico con tecnología E-ZPass que se utiliza actualmente para atravesar puentes y túneles de la ciudad. A los conductores que ingresen en la zona de congestión se les cobrará automáticamente a través de etiquetas E-ZPass colocadas en sus automóviles. Si no tuviera etiqueta, una cámara tomará una fotografía de la placa de matrícula del conductor para facturárselo más tarde.
Coste de los atascos
Recientemente se publicó un estudio en el que cifraba el coste económico por la congestión del tráfico en 100.000 millones de dólares durante los próximos cinco años para el área metropolitana de Nueva York. Esa cifra incluye las horas de trabajo perdidas por los atascos, el coste adicional en gasolina y otros gastos operativos. También señalaban que la congestión creció un 56% durante la última década en los distritos del centro de Manhattan.
Londres, Estocolmo y Singapur fija tasas de congestión para los conductores que quieran acceder a determinadas zonas. A pesar de las reticencias iniciales, las medidas han demostrado ser efectivas para la reducción del tráfico, la congestión y la contaminación del aire. En Londres, por ejemplo, el tráfico se redujo un 18% un año después de implantar esta medida. Los retrasos se redujeron un 30%. La velocidad promedio aumentó en 10 millas la hora y la calidad del aire mejoró al disminuir las emisiones de partículas y óxidos de nitrógeno un 12%. En estas tres ciudades lo recaudado también ha servido para financiar mejoras en el transporte y las infraestructuras, nuevos autobuses, carriles bici y otros servicios de transporte público.