Educación Vial en Europa
- Fundación Mapfre destaca en España desarrollando guías para docentes que están adaptadas a diferentes grupos de edad: hay guías para niños de 3 a 5 años; de 6 a 8 años; de 9 a 11 años y de 12 a 16 años
28 enero 2020
El Consejo Europeo de Seguridad en el Transporte (ETSC) ha publicado un informe, en colaboración con la fundación flamenca VSV y Fundación Mapfre, en el que se recogen 17 recomendaciones o principios que deberán desarrollar todos los países europeos para garantizar una educación vial de calidad. Asegurar que llegue a todos, especialmente a los jóvenes de 0 a 18 años.
Además cada recomendación está acompaña de ejemplos de buenas prácticas y se agrupan en cinco grupos temáticos:
Asegurar el derecho a recibir una educación sobre movilidad y seguridad vial
Este capítulo recoge cuatro medidas: todos los niños y jóvenes deben recibir educación de alta calidad sobre seguridad vial con continuidad y progresión; la enseñanza de la seguridad vial debe integrarse en las escuelas a través de los planes de estudio con un mínimo de horas lectivas; establecer objetivos estratégicos, tácticos y operativos; y asignar recursos suficientes. Solo en Irlanda, Alemania y República Checa se imparte educación para la seguridad vial y la movilidad en todos los niveles educativos: preescolar, primaria, secundaria y terciaria, es decir, desde los 0 a los 18 años. Estos tres países registran unas cifras inferiores a la media de la UE en mortalidad de menores de 18 en accidentes de tráfico.
Compromiso y apoyo de los centros de enseñanza
Este bloque temático se articula también en torno a cuatro medidas o recomendaciones: participación y apoyo a la gestión en las escuelas, motivar a las escuelas a adoptar una política de movilidad y seguridad vial; seleccionar a uno de los profesores para que sirva de mediador entre Tráfico y la escuela e imparta esta educación vial en su centro (en Dinamarca existe uno en todos los centros de enseñanza para alumnos entre los 6 y los 16 años); y fortalecer la competencia de los docentes y apoyarlos. Fundación Mapfre destaca en España desarrollando guías para docentes que están adaptadas a diferentes grupos de edad: hay guías para niños de 3 a 5 años; de 6 a 8 años; de 9 a 11 años y de 12 a 16 años.
Asegurar una educación de alta calidad
En este caso son cinco las recomendaciones para garantizar la calidad de la educación vial que se imparta: primeramente que la educación vial se centra en el conocimiento, las habilidades, las actitudes, las motivaciones y la capacitación. En este sentido el programa "Do It Right" que se imparte en Grecia para adolescentes no solo se enfoca en el desarrollo de habilidades, sino que promueve también una mentalidad segura al cambiar creencias y falsos mitos. Este programa se centra en factores de riesgo como el alcohol, el cinturón de seguridad, el tiempo de reacción y distancia de frenado y factores psicológicos que afectan a la conducción. Otras medidas son: mantener al día los contenidos en educación vial; utilizar recursos didácticos, materiales educativos de calidad; evaluar y analizar los resultados. Por ejemplo, en Dinamarca los alumnos que han recibido educación vial deben responder una encuesta online después de cada lección); y también permitir que los alumnos se autoevalúen. En Bosnia-Herzegovina, asociaciones de automovilísticas y otras partes interesadas organizan un concurso "Niños en el tráfico" que incluye un examen sobre conocimiento de normas de tráfico y un examen práctico de habilidades en un campo de entrenamiento.
Educación trasversal de la seguridad vial (como matemáticas o física, especialmente en secundaria). En Austria, aunque no es obligatoria la enseñanza de la educación vial, sí debe integrarse, cuando sea posible, en otras materias. Para ello desarrollo un enfoque flexible y modular con una serie de lecciones sugeridas: riesgo y presión de grupo; competencia social del tráfico; distracción y modos de tráfico y su potencial. Capacitación de los docentes encargados de impartir estas materias y realizar un seguimiento. En Países Bajos se realizan inspecciones escolares obligatorias y, dado que la educación vial forma parte de estas materias evaluables, el Departamento de Educación de este país puede exigir que se cumplan los requisitos mínimos, incluso puede imponer sanciones si no ocurre así.
La seguridad vial es una responsabilidad compartida y todas las partes implicadas (padres, alumnos, profesores, policía municipal, autoridades locales, empresas, etc.) deben participar en todos los niveles. En Noruega la política de seguridad vial está muy arraigada en los municipios implicando de manera muy activa a los Ayuntamientos y a los centros de enseñanza.