Un guía para obtener financiación europea para la bici
- Las 27 guías detalladas por países muestran cómo solicitar fondos de la UE, además de describir cómo el desarrollo del transporte en bicicleta y el turismo puede beneficiar a las economías nacionales y locales.
15 diciembre 2020
La Federación Europea de Cilistas (ECF) ha publicado una guía específica por cada país perteneciente a la UE para facilitar a las autoridades locales y regionales el acceso a los Fondos Estructurales de la UE y ayudar a impulsar un cambio modal hacia el ciclismo. En particular, existe la necesidad de rutas ciclistas seguras y cómodas en las zonas urbanas, periurbanas y rurales de toda Europa.
Actualmente hay dos fuentes principales de financiación de la UE disponibles para lograrlo: los Fondos Estructurales de la UE como parte del presupuesto ordinario de la UE y el Fondo de Recuperación y Resiliencia que se estableció para abordar la crisis económica causada por la pandemia de COVID-19.
Con 2021 marcando el comienzo del nuevo marco financiero plurianual de siete años de la UE, existe una gran oportunidad para obtener importantes fondos de la UE para el ciclismo. Con este fin, la ECF anima a las autoridades a incluir iniciativas a favor del ciclo en los documentos de programación del Fondo Europeo de Desarrollo Regional. Para desencadenar un cambio modal significativo, la ECF estima que en el próximo período financiero (2021-2027), se necesitarán 6.000 millones de euros de inversión en infraestructura para bicicletas.
Las 27 guías detalladas por países muestran cómo solicitar fondos de la UE -en este enlace puedes acceder a la elaborada para España-, además de describir cómo el desarrollo del transporte en bicicleta y el turismo puede beneficiar a las economías nacionales y locales. Se proporcionan evaluaciones específicas de cada país y se describen los beneficios de las inversiones en bicicleta, que también pueden ayudar a abordar muchos desafíos específicos de cada país. Se identifican varios ejemplos de buenas prácticas tanto en términos de proyectos de ciclismo como de referencias al ciclismo en los documentos de programación.
El debate sobre la utilidad de los carriles bici en los centros urbanos está teniendo lugar en la actualidad en muchas metrópolis europeas. El ejemplo de Valencia parece ofrecer una respuesta decisiva: si se dota a una ciudad de carriles bici, la gente los usa. En sólo dos años desde el uso de fondos de la UE para dotar al centro de Valencia de infraestructura ciclista, el número de ciclistas se ha doblado. Al mismo tiempo, análisis del tráfico de coches muestra que el número de vehículos motorizados en las carreteras se ha reducido más o menos al mismo ritmo que se ha incrementado el número de ciclistas.
Velo Małopolska es una red de rutas ciclistas de alta calidad en toda la provincial para mostrar a los turistas la gran herencia natural y cultural de la región de Małopolska. La ruta del Río Vistula (232 km) es la parte central de la red. Los carriles bici del río son cada vez más populares tanto entre ciclistas de carretera como para otros con menos experiencia. El perfil casi llano de las rutas, los monumentos históricos cercanos a los ríos y la experiencia de disfrutar de la naturaleza hace de las rutas de los márgenes del río un producto perfecto para el turismo. Más de 200 kilómetros de vistas de montaña son el reclamo de otra ruta ciclista de la red, VeloDunajec. Creada de acuerdo con los estándares europeos, tiene una señalización clara y muchos puntos de servicio. Cruza las zonas pintorescas del valle de Dunajec, con vistas de varias cordilleras montañosas: los Tatras, montañas Gorce, Beskids y Pieniny.
Otras rutas de la red son, entre otras, VeloKrynica, VeloRaba, VeloNatura y VeloMetropolis, todas exploran otra parte de la rica herencia de la región. El gobierno local garantizó que todas las rutas cumplieran los estándares de EuroVelo, por lo que VeloNatura es parte de EuroVelo 11 Ruta del Este de Europa y VeloMetropolis es una sección de la Ruta de Europa Central EuroVelo 4.
El potencial del transporte ciclista no se limita a secciones cortas. Las autopistas ciclistas llevan a los ciclistas con rapidez, seguridad y comodidad más allá de su destino. Flanders está desarrollando 110 de estas rutas, con un total de 2.400 kilómetros. De las 110 rutas, 61 ya se usan. Una autopista ciclista es un producto de movilidad que combina diferentes tipos de infraestructura como carriles bici o ciclo carriles, para proporcionar una conexión ciclista funcional de alta calidad. Como parte central de una red ciclista, conecta ciudades y/o
suburbios, zonas residenciales y los principales centros de trabajo.
La prioridad es que el ciclista vaya rápido y seguro a su destino final. Las características de una autopista ciclista incluyen: número limitado de paradas, prioridad ciclista en lo posible, superficie ancha y confortable y diseño lineal, entre otros. En especial en combinación con el creciente número de bicicletas eléctricas, la innovación en autopistas ciclistas es un modo efectivo de sacar a los trabajadores de sus coches. Según Tom Dehaene, adjunto de movilidad en el Brabante Flamenco, la popularidad de las autopistas ciclistas creció rápido durante la epidemia del coronavirus. Aunque se redujeron los desplazamientos por trabajo, no se redujo el número de ciclistas, ya que los expertos aconsejaron a los teletrabajadores que hicieran ejercicio. “En las últimas semanas registramos casi el doble de ciclistas en algunos puntos con contadores. Desaparecieron del gráfico las típicas horas punta de la mañana y de la tarde y apareció un pico ciclista poco después del mediodía” – añadió Dehaene. Este ejemplo sirve de base a la tesis de que la bicicleta está entre las herramientas más efectivas en la lucha contra la pandemia.