Argentina debate el "cero alcohol" al volante
- Sigue la estela de Brasil, Paraguay o Uruguay, que cuentan con leyes similares, y de diez provincias argentinas donde ya se ha implantado
09 septiembre 2022
El proyecto de Ley de Alcohol Cero al volante para todo el territorio nacional argentino se presentó en abril de 2021. Esta semana ha comenzado su debate en la Comisión de Transportes de la Cámara de Diputados, cuyo dictamen favorable es necesario para que pase a pleno.
El director ejecutivo de la Agencia Nacional de Seguridad Vial de Argentina, Pablo Martínez Carignano, ha declarado que “es necesario que Argentina deje atrás una norma vieja y tengamos una que va a salvar miles de vidas jóvenes”. Además, ha explicado que esta regulación sigue el ejemplo ya puesto en práctica a nivel local en diez provincias del país y en varias ciudades grandes como Mar del Plata o Rosario.
El mismo proyecto de ley recuerda que tres países de la zona -Brasil, Uruguay y Paraguay- cuentan con regulación en este sentido. "Según el Ministerio de Salud de Brasil, luego de dos años de vigencia de la Ley, Río de Janeiro, por ejemplo, tuvo una reducción del 32% en las muertes por accidentes automovilísticos", señala el texto.
Añade que "el proyecto que propiciamos esclarece y potencia el mensaje: Alcohol 0 al conducir. No se trata de discutir sobre graduaciones, sobre si un poco más o menos. Se trata de una decisión de salud pública en defensa de la vida".
Martínez Carignano ha explicado que cuentan con la resistencia del sector vitivinícola, pero sostiene que "no hay dato alguno que pruebe que el Alcohol Cero haga bajar el consumo". En este sentido, afirma que "los bares de Rosario, de Mar del Plata o de Córdoba están llenos, la gente no deja de tomar vino… la situación es igual a lo que se planteó cuando se prohibió fumar en los restaurantes y los gastronómicos se agarraban la cabeza: no pasó nada de lo que vaticinaban".
La Comisión de Transportes también ha registrado la intervención de Viviam Perrone, integrante de la Asociación Madres del Dolor, que ha asegurado que no se trata de una ley seca, sino que "lo que estamos diciendo es que toda persona que salga a cenar y le guste tomar una copa está perfecto, lo que no puede es salir después a conducir".
Necesario, pero no suficiente
Añade que se necesita "educación vial y controles. No sirve de nada esta ley si no hay controles después”. “La primera causa de muerte en jóvenes en la Argentina no es la droga, no es el hambre ni la delincuencia, que son todos temas importantes, sino el motivo por el que pierden sus vidas es por hechos viales y son los más fáciles de evitar”, afirma.
Precisamente el asunto de los controles es uno de los más controvertidos en la tramitación de esta ley por las dudas en torno a su fiabilidad. Sin embargo, el responsable de Seguridad Vial las rechaza: "En los controles que realizamos a diario, 95 de cada 100 veces la pantalla del aparato dice cero, no casi cero, más o menos cero, ni olor a cero. Dice cero", asevera.
Según datos del propio Gobierno argentino, los siniestros viales son la principal causa de muerte en las personas jóvenes menores de 35 años. El alcohol está presente en al menos uno de cada cuatro siniestros.