El 80% conduce a la velocidad límite
- Más de la mitad de los conductores opinan que se debe promover el uso de tencologías de asistencia a la conducción porque mejora la seguridad vial
11 noviembre 2013
La Fundación RACC, con la colaboración del programa eSafety Aware de la Federación Internacional del Automóvil (FIA), ha realizado un estudio que analiza la opinión de los conductores respecto al uso de las nuevas tecnologías de ayuda a la conducción. El 71% de los conductores utiliza algún sistemade ayuda a la conducción. Entre los preferidos se encuentra la radio FM (80,3%), seguido del manos libres (40%) y del navegador GPS portátil (33%). El tipo de información que los conductores consultados considera más útil es la que avisa del límite de velocidad en cada momento.
Radares y velocidad.
El 70% no utiliza ningún tipo de dispositivo que avise sobre la ubicación de radares de velocidad, frente al 28% que reconoce utilizar avisadores y el 2% que utiliza detectores de radar. Solo un 0,04% reconoce el uso de inhibidores (aunque se trata de una infracción considerada muy grave). En el caso de los conductores que reconocen conducir por encima del límite de velocidad, el uso de los detectores se ve incrementado un 123%, mientras que el uso de avisadores aumenta un 53% respecto a la media. Sobre la opinión de si los detectores de radar deberían estar prohibidos o no, está muy dividida entre el sí y el no, siendo más favorable la de mantenerlos legales entre los conductores de vehículos deportivos y de alta gama. La opinión más común en la que coinciden un 54% de los conductores encuestados es que los límites de velocidad en España son correctos, pero debería aumentarse en determinadas carreteras, como las autopistas. El 60% de los conductores reconoce haber sido sancionado alguna vez por exceso de velocidad y el 15% admite haber conducido por encima del límite de velocidad de la vía de forma habitual a no ser que haya un radar.
La encuesta revela que existe una preocupación de los conductores por conocer el límite de velocidad en cada momento, y la necesidad de ayuda tecnológica para poder mantener una conducción segura; a la vez, otro segmento se vale de la tecnología para mantener los límites cuando hay radares.