Nuevos datos sobre la somnolencia al volante
- "Quedarse dormido al volante es un hecho de extrema gravedad por el evidente riesgo que genera en la conducción con un probable riesgo de accidente"
16 julio 2015
La Fundación CEA ha presentado recientemente el estudio "Sueño y fatiga, ¿cuáles son los hábitos de los conductores españoles?", cuyo objetivo es averiguar como de concienciados están los conductores de nuestro país sobre la importancia de haber descansado previamente antes de conducir. La Fundación destaca el profundo desconocimiento sobre la somnolencia producida por ingerir medicamentos, la necesidad de descansar después de 2 horas de viaje o la importancia de haber dormido un mínimo de 8 horas. Esto se refleja en que más de 15 millones de conductores en España se han quedado dormidos alguna vez al volante.
En el estudio se destaca que quedarse dormido al volante es un hecho de extrema gravedad por el evidente riesgo que genera en la conducción y la probabilidad de sufrir un accidente. Además, considera grave que casi un 60% de conductores haya sufrido alguna vez micro-sueños al volante, y que más de un 70% hayan tenido somnolencia mientras conducían.
Los tratamientos farmacológicos y los trastornos del sueño ayudan a tener o incrementar la sensación de fatiga, a producir situaciones de somnolencia y, en algunas ocasiones, a quedarse dormido al volante. En este sentido, el director de la Fundación CEA, Fernando González Iturbe, ha resaltado la importancia de que los médicos informen a los pacientes que se puedan encontrar, por tratamiento o enfermedad, expuestos a estos casos de extremada gravedad.
Detectores de fatiga de serie
Para reducir, en la medida de lo posible, este factor de riesgo de los accidentes de tráfico, la Fundación CEA ha solicitado a la Unión Europea (UE) y a los fabricantes de coches que se incluyan de serie en los vehículos sistemas de seguridad que detecten y avisen al conductor si se encuentra en una situación de fatiga y/o somnolencia. De esta manera se evitará la perdida de consciencia de la persona que conduce el vehículo.
Los jóvenes sufren más riesgo
La Fundación CEA afirma que los que más riesgo presentan de sufrir somnolencia conduciendo son los jóvenes de 18 a 29 años, ya sean trabajadores nocturnos, por trastornos del sueño o por los efectos del alcohol y las drogas.
En cuanto a la accidentalidad vial laboral, los accidentes de tráfico mortales se dan mayoritariamente de lunes a viernes entre las 8 de la mañana y las 8 de la tarde, debido a que se baja la guardia por la habitualidad de realizar el mismo recorrido contínuamente. La rutina, las prisas y el cansancio son los principales factores de riesgo de los accidentes viales laborales.
Las peticiones
En primer lugar, reclaman a las instituciones más implicación para concienciar a los conductores sobre los problemas de la somnolencia al volante, y también a la Dirección General de Tráfico la creación de campañas que muestre el verdadero riesgo de conducir con sueño.
La elaboración de una normativa que obligue a los países miembros de la UE a incluir en los vehículos dispositivos de seguridad para evitar la somnolencia.
Los médicos, especialistas y farmacéuticos deben informar a los pacientes sobre posibles efectos adversos de algunos medicamentos para conducir.
Las farmacéuticas deben añadir en la caja de los medicamentos de manera clara un aviso que alerte de no manejar máquinas o vehículos posteriormente.
Si se demuestra tal hecho, el infractor se enfrenta, por una imprudencia grave, a una sanción de hasta 10 años de retirada de carnet de conducir y hasta 5 de prisión.
- CONSECUENCIAS: Más del 70% de conductores han sufrido somnolencia alguna vez al volante. La consecuencia más frecuente es la pérdida de concentración, en un 41% de los conductores. El 33% sufre parpadeo constante de ojos y en última instancia, el 26% padece de dolores de espalda o calambres.
- DESCANSOS: El hábito de hacer descansos durante los viajes está bien asentado, pero el 50% de los conductores tan solo realizaron paradas cuando se sentían cansados. Lo recomendable es parar cada dos horas, pauta que siguió el 45% de los conductores. El 5% restante no se detuvo a descansar aun sintiéndose fatigados.
- DORMIDOS: Más allá de la somnolencia, el acto de quedarse dormido al volante lo han sufrido el 59% de conductores.
