Una señalización confusa en carretera causa distracciones
- 2 de cada 3 entrevistados centran su atención en la señalización por encima de las indicaciones del navegador, frente a un 32% que admite prestar más atención a lo que les señala el GPS
21 diciembre 2018
Un 73% de los conductores ha tomado decisiones incorrectas por culpa de la mala señalización. Esta es una de las principales conclusiones del estudio elaborado por BP España, Castrol y el Race en el marco de la campaña #AlVolanteLoImportante.
Causas externas de distracción
El estudio, realizado a un panel de 2.000 conductores españoles, analiza los diferentes elementos externos que pueden distraer durante la conducción. En este sentido, los tres principales factores que comportan un riesgo al volante son la presencia de otros usuarios en la vía como peatones, ciclistas, camiones o motos (55% de los encuestados), la existencia de accidentes en la carretera (52%) y una señalización confusa (48%).
En términos generales, las personas entrevistadas consideran que la señalización en las vías es importante, sobre todo en estas fechas señaladas en las que hay menos horas de luz. En concreto, para la inmensa mayoría de usuarios (91%) la señalización vertical es un aspecto fundamental para garantizar una conducción segura. Esta puede ser una de las razones por las que el GPS, cuyo uso se ha generalizado entre los usuarios de los vehículos, no ha llegado a sustituir la funcionalidad de las señales de orientación, a pesar de que su uso sigue en aumento, especialmente en los viajes en los que no se conoce bien el destino, como ocurre a veces en Navidad.
Así, incluso en caso de duda, 2 de cada 3 entrevistados centran su atención en la señalización por encima de las indicaciones del navegador, frente a un 32% que admite prestar más atención a lo que les señala el GPS. No obstante, casi la mitad de los conductores entrevistados (46%) reconoce que lo utiliza de manera habitual mientras conduce, como método de guía para llegar al destino elegido y no para otras funcionalidades como advertencia ante radares y controles policiales, para conocer el estado de la vía o con el objetivo de informarse sobre el límite de velocidad de la calzada por la que transita.
Un 37% admite haber realizado en alguna ocasión algún tipo de maniobra incorrecta que ha puesto en peligro su propia integridad o la del resto de conductores debido al mismo motivo. Estos datos pueden ir emparejados a la existencia de un problema con la visibilidad de las señales, ya que el 51% está de acuerdo en subrayar que, en ocasiones, la señalización no se sitúa con antelación suficiente, el 35% apunta que no es lo suficientemente grande para ser vista correctamente, y un 28% piensa que, muchas veces, está situada en lugares de escasa visibilidad, incluso en ocasiones tapada por la vegetación. Durante los desplazamientos en este período es importante prestar atención a los motivos meteorológicos adversos que nos impidan una correcta visualización de las señales, tales como la niebla, la nieve o las intensas lluvias.
El estudio pone de manifiesto, además, que el buen hacer de las señales depende también del nivel de comprensión de las mismas por parte de los conductores que las interpretan. En este sentido, un 22% de los encuestados reconoce que no conoce el significado de todas las señales, un 31% afirma que la señalización no es fácil de entender y un porcentaje igual apunta que las señales no son creíbles.
Finalmente, cabe destacar que las señales no son el único elemento externo de distracción mientras se conduce, aunque sí el de mayor relevancia: para un 14% y un 25% respectivamente, el paisaje y la presencia de carteles publicitarios también pueden suponer una distracción.