Seguridad a la noruega
- La limitación de velocidad es la medida más efectiva para reducir accidentes de tráfico
16 junio 2014
Nuestro país alcanzó en 2013 una tasa de 37 muertos por millón de habitantes, siete años antes de la fecha prevista, 2020, para lograr este objetivo. Se sitúa ahora entre los primeros cinco países europeos con mejores índices de mortalidad. La pregunta que se hacen todos los expertos es si será posible otra reducción del 50%.
Una investigación del Instituto de Economía del Transporte de Noruega, editada ahora por la Fundación Mapfre en castellano, ‘El Manual de Medidas de Seguridad Vial’, responde a esta cuestión y demuestra que hay vías por explorar, en concreto 128 medidas avaladas por más de 2.000 investigaciones de todo el mundo, seleccionadas con el requisito previo de haber sido publicadas en revistas científicas. Entre las medidas con mayor impacto en la reducción de accidentes con víctimas, los investigadores noruegos destacan la limitación de la velocidad. Rune Elvik, uno de los autores del libro, explica que “si un límite de velocidad se reduce en 10 km/h, la velocidad media del tráfico se reducirá 2-4 km/h y esto reducirá a su vez los accidentes entre un 10 y un 15%”.
Medidas novedosas
De las 72 medidas que el informe del organismo noruego identifica como realmente efectivas, hay algunas que o bien están en fase de implantación en España, como es el calmado zonal del tráfico o el establecimiento de comunidades seguras , o son recomendaciones, como las luces de conducción diurna (que reduce el número de accidentes con varios vehículos implicados alrededor de un 6%) o aún no se han abordado.
De las medidas novedosas destaca la implantación de las inspecciones de vehículos a pie de carretera, que tiene como objetivo, según el investigador noruego Rune Elvik, “identificar los defectos técnicos de los vehículos en circulación y reducir el número de accidentes al garantizar que los defectos o que los vehículos son retirados del tráfico”. Otra de las soluciones que en España no hemos incorporado es el permiso de conducir por etapas, que consta en general de tres partes: durante la primera fase, el aprendizaje se realiza acompañado de un tutor; la fase intermedia se conduce con algunas restricciones relacionadas con la conducción nocturna, conducción en autopistas y autovías, el número de pasajeros o el número de infracciones que pueden cometerse durante esta fase; y una fase final sin restricciones. Este sistema reduce los accidentes con víctimas entre un 6-14% y la mortalidad un 28%.
El número total de accidentes se reduce significativamente en las rotondas, especialmente en el caso de accidentes mortales, un 66% de reducción. Los accidentes con daños exclusivamente materiales se incrementan, aunque el efecto no es significativo (un 10%). Hay diferencias también entre áreas rurales (-69%) y áreas urbanas (-25%). Esto puede deberse, según los autores del libro, a que las “rotondas son mayores cuando los límites de velocidad también son mayores”. También se ha observado que la reducción en el número de accidentes con implicación de ciclistas es algo menor, alrededor de un 10-20%, en comparación con la reducción del 30-40% respecto al número total de accidentes.
Un ocupante de ciclomotor o motocicleta reduce su probabilidad de sufrir una lesión grave un 25% solo por utiliar el casco. Si además utiliza ropa de protección de cuero elimina un 30% de posibilidades de resultar gravemente herido. Igualmente un peatón que lleve un reflectante durante la noche disminuye el riesgo de ser atropellado entre un 70 y un 90%. El ocupante de un automóvil con el cinturón de seguridad abrochado tiene un 20-30% menos de probabilidad de resultar lesionado y un 40-50% de morir, que otro ocupante sin cinturón.