Derecho a la Educación, Formación e Información
- Exámenes, centros de reconocimiento, redes sociales, parques infantiles...
04 diciembre 2018
En 1978 había en España casi 7 millones de conductores, el 80% de los cuales eran varones. Actualmente, hay más de 26 millones de personas titulares de, al menos, un permiso de conducir, con un porcentaje de conductoras que llega al 42%. Curiosamente, en 1978 se expidieron 825.000 permisos de conducir, casi 200.000 más que el pasado 2017.
Mucho ha cambiado en la obtención del permiso: la formación de los conductores, de los profesores y de los examinadores de Tráfico; nuevas pruebas, nuevas maniobras, con una creciente relevancia de los contenidos relativos a la seguridad en las vías. Hasta el propio documento, el permiso, se ha transformado: de una ‘sábana’ de papel de color rosa a una tarjeta de plástico.
Informando al ciudadano
En 1985, la DGT abrió dos vías de información directa al ciudadano. Una de ellas fue el servicio telefónico de información sobre el trafico. La otra, la revista “Tráfico”, una publicación en papel que nació para divulgar el por entonces desconocido asunto de la seguridad vial y que llegó a ser una de las publicaciones de mayor tirada en España, con 350.000 ejemplares por número. Con los años han ido surgiendo más vías de comunicación. En 1995 llega la información radiofónica del estado de las carreteras. En 1998, se pone en marcha la web www.dgt.es y, con ella, la versión digital de “Tráfico y Seguridad Vial”, hoy con más de 6.000.000 de visitas anuales (www.revista.dgt.es). En 2013 se lanzan las redes sociales de la DGT, actualmente con cuentas oficiales en Facebook y Twitter –suman 500.000 seguidores–, Youtube e Instagram –10.000 cada una–, con informaciones prácticas diarias del tráfico para todo tipo de usuarios.
El aprendizaje de la conducción han evolucionado, con cambios continuos en la formación, durante los últimos 40 años. Respecto al permiso de la clase B, en los años 80 se modificó el formato de los exámenes, y las maniobras de circuito cerrado (aparcamiento, giro en ángulo...) se integran en la prueba de circulación abierta. Además, en esos años se realizan por primera vez cursos para profesores de autoescuela reglados e impartidos por la DGT. En los 90 se reguló la duración de las pruebas de conducción del permiso de la clase B: 25 minutos para los permisos A y B y 45 para el resto. En 2013 los exámenes prácticos del B se completan con más comprobaciones previas, una parte de conducción autónoma (sin instrucciones del examinador) y valoración de la conducción eficiente. La última novedad está por venir: 8 horas de seguridad vial, presenciales y obligatorias, para obtener el permiso.
