Drones: así es la vigilancia
- Los drones captaron 220 infracciones, el 12% de ellas por distracciones y uso del móvil al volante
26 enero 2021
Desde 2019, la DGT utiliza once drones para vigilar, controlar y gestionar el tráfico. Se destinan prioritariamente a la vigilancia del tráfico y, según la instrucción que regula su funcionamiento, “en particular a través de estos sistemas se intensificarán: las vigilancias en tramos de riesgo; las destinadas a la protección de usuarios vulnerables de las vías en tránsito, en particular, de los ciclistas, motociclistas y peatones; la supervisión de distracciones durante la conducción; y los controles de velocidad”.
Tres drones cuentan con el informe técnico del Centro Español de Metrología para poder vigilar el tráfico y detectar infracción, mientras los 8 restantes se emplean en monitorizar y regular el tráfico.
Así, de enero a agosto de 2020, los drones –que han realizado más de 430 horas de vuelo: 316 de vigilancia y 55, de regulación– habían captado 220 infracciones, la mayoría por no respetar la prioridad (28%). También destacan el uso incorrecto de cinturón de seguridad o SRI (16%), el uso del móvil al volante (12%) o no respetar las marcas longitudinales de la calzada (12%). Un ejemplo claro en la protección de vulnerables es que un 4% de las infracciones captadas por drones son por adelantar a ciclistas sin respetar la distancia mínima de seguridad (art. 85).
Así funciona, paso a paso
1: ELEGIR EL TRAMO A VIGILAR
Los jefes provinciales de Tráfico, los Centros de Control de la DGT y los subsectores de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, en base a sus datos, son quienes determinan qué tramos necesitarían que los drones vigilaran la circulación. Con estos datos, y teniendo en cuenta las limitaciones por cuestiones de seguridad (espacio aéreo no controlado, lejos de aeródromos y aeropuertos, posibilidad de estacionar una unidad para realizar el control…), la UMA realiza un listado de las zonas de misiones y un calendario de fechas y tramos.
2: UNA BASE SEGURA DE DESPEGUE
Una vez determinado, con antelación y de acuerdo con la jefatura provincial de Tráfico, el punto a vigilar con los drones, se elije un punto cercano al tramo a vigilar donde se puede estacionar con seguridad la furgoneta de la Unidad de Medios Aéreos (UMA). Allí, dicha unidad despliega una manga de viento –para controlar la dirección y velocidad del mismo, que pueden afectar al vuelo–, señaliza en el suelo un perímetro de seguridad donde despegará y aterrizará el dron.
3: MONTAR Y COMPROBAR
El paso siguiente es el montaje del dron (que viaja desmontaje y protegido) y comprobar el funcionamiento y la calibración del aparato y de las cámaras que servirán la vigilar la circulación y captar y grabar las posibles infracciones. Después, se sitúa en el área de seguridad destinada al despegue y, una vez instalada la batería –con una autonomía de vuelo de unos 20 minutos, en función de las características del vuelo y la climatología– el aparato está listo para emprender la misión.
4: DOS OPERADORES
Los dos operadores implicados en la vigilancia hacen despegar el dron, que en su vuelo no cruzará la carretera –salvo autorización expresa– ni volará por encima de 120 metros, ni cerca de lugares estratégicos –aeródromos, aeropuertos, instalaciones de seguridad…– y siempre en el campo visual del piloto. El dron siempre es operado por un piloto acreditado que controla el vuelo; la cámara puede ser controlada y manejada bien por un funcionario de la UMA o bien por un agente de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, lo cual condiciona la forma de notificar la multa.
5: SOBREVOLAR Y OBSERVAR
Comienza entonces la parte más premiosa de la misión. El dron sobrevuela las inmediaciones de la carretera en el punto o puntos en que se solicita la vigilancia –por ejemplo, en nuestro caso concreto se trataba de un cruce regulado por un Stop–. Mientras, el operador de la cámara se dedica a observar y vigilar las maniobras de los conductores, cuyas infracciones quedan grabadas en soporte informático en el equipo que desplaza la Unidad de Medios Aéreos.
6: NOTIFICAR LA DENUNCIA
En función de la disponibilidad, o no, una patrulla de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil se sitúa en las cercanías de la vía vigilada y, en caso de producirse una infracción, siguiendo las instrucciones del operador de la cámara del dron, detiene al conductor responsable y le notifican la apertura del expediente sancionador in situ. Naturalmente, salvo en los casos en que sea imposible hacerlo determinados por la correspondiente normativa.