Salvar al pasajero de atrás
- Olvidar a un bebé o a una mascota dentro de un coche que hemos dejado al sol puede tener consecuencias trágicas
23 junio 2021
Una alerta visual en la pantalla central del vehículo durante diez segundos o hasta que se cancele y un aviso sonoro recuerdan al conductor que debe comprobar los asientos traseros para evitar que un pasajero (bebé o mascota) se quede atrapado al cerrar el coche, un descuido que puede acabar en tragedia si ocurre en fechas veraniegas debido a las elevadas temperaturas y a los golpes de calor que provocan.
Se trata del nuevo dispositivo de Ford, la Alerta de Ocupante Trasero que se activa cuando el vehículo se ha detenido y hemos apagado el contacto y siempre que hayamos abierto las puertas traseras al inicio del viaje. También puede evitar que nos dejemos olvidados objetos valiosos, como un ordenador o un bolso, y que nos los acaben robando.
Con esculturas de hielo
Para demostrar lo peligroso que es el calor dentro de un coche parado, Ford ha realizado un curioso experimento en sus instalaciones "Weather Factory", situadas en Colonia (Alemania). Encargó a un escultor de hielo un "bebé de hielo" (de unos 12 meses, con un chupete y sosteniendo un juguete) y un "perro de hielo" (un labrador de tamaño natural, con un collar).
Ambas esculturas se colocaron dentro de un vehículo con una temperatura exterior de 35oC. En pocos minutos, en el interior del vehículo se registraron 50oC, por lo que las dos esculturas comenzaron a derretirse rápidamente. Así se demostraron las consecuencias del efecto invernadero en los vehículos, ya que la radiación de onda corta entra por las ventanas, rebota en los asientos y el salpicadero y calienta el vehículo.
El peligro del calor
Según el grupo KidandCars.org, dejar a los niños en el coche o que estos accedan sin que lo sepamos a su interior son los principales riesgos de muerte por hipertermia (golpe de calor), ya que el cuerpo de un niño se sobrecalienta entre tres y cinco veces más rápido que el de un adulto. De hecho, en Estados Unidos se producen por este motivo 39 muertes al año (1 cada 9 días). En Europa, los casos son menos, aunque sí hay registradas muertes en Irlanda, Francia y Bélgica.
Para las mascotas, el calor también es peligroso. Según los datos que ofrece la RSPCA (Royal Society for the Prevention of Cruelty to Animals), entre 2009 y 2018, en Inglaterra y Gales, se contabilizaron casi 65.000 incidentes de animales por las altas temperaturas. Esta misma entidad apunta que un perro tarda solo seis minutos en morir en un coche que dejamos al sol.