El peligro de unas escobillas en mal estado
- Unas escobillas deterioradas pueden rayar el cristal del parabrisas, además de no limpiar adecuadamente cuando llueve
22 septiembre 2021
Con el otoño ya aquí, pronto vienen las lluvias, que traen nuevos peligros a la carretera. Diversos estudios apuntan que el riesgo de sufrir un accidente de tráfico aumenta el 70% cuando llueve. Solemos decir que es más peligroso conducir con lluvia, pero la clave no está en que el asfalto esté seco o mojado, sino en la reducción de la visibilidad que se produce. Y ahí tiene un papel determinante el estado en el que llevemos el limpiaparabrisas y las escobillas.
Según explican desde la compañía Carglass, cuando llueve, hay menos luz ambiental y, además, las gotas de agua en el aire reducen la visibilidad horizontal. Asimismo, la lluvia modifica drásticamente el entorno visual de los conductores, especialmente de noche: entre otras cosas, filtra parte de la luz de los faros y reduce las zonas iluminadas, cambia la luz que se refleja en la carretera, reduce las propiedades reflectantes de las marcas viales, disminuye el contraste entre objetos y fondo y cambia la percepción visual de ciertas superficies.
Lo más peligroso es que la lluvia afecta a la capacidad del conductor para ver a través del parabrisas: incluso con estos en funcionamiento, las gotas de agua en el cristal distorsionan la luz (no es una capa uniforma) y reducen el rendimiento visual del conductor. Todo esto se multiplica si el parabrisas tiene algún desperfecto (impactos, grietas, arañazos, etc.) o si las escobillas están en mal estado. En este último caso, cuando llueve, unas escobillas deterioradas dejan surcos de agua en cada barrido y, además, pueden rayar el cristal.
Por eso, se recomienda revisar con frecuencia tanto el estado del limpiaparabrisas como de las escobillas y sustituir estas últimas al menos una vez al año (más, si recorremos muchos kilómetros).
A pesar de que tener una buena visibilidad es fundamental para evitar que tengamos un accidente, en general, no prestamos mucha atención al parabrisas y sus elementos. Así lo muestra el reciente estudio de FESVIAL (Fundación para la Seguridad Vial), donde el 75% de los usuarios admitieron haber conducido con las escobillas en mal estado o con el parabrisas sucio. Más del 70% aseguraron que no cambian las escobillas con la frecuencia recomendada.
Además, el 60% de las personas encuestadas reconocieron que no comprueban que su parabrisas esté limpio para que les permita tener buena visión.