Aparcamiento con asistencia
- Existen varios tipos de asistentes de aparcamiento, desde el sonoro al automático
20 mayo 2024
Hoy en día, los coches modernos cada vez salen de fábrica con más asistentes al conductor, tanto en materia de conducción como de seguridad. Y ante el aumento de tamaño de los vehículos y el espacio cada vez más reducido para aparcar, uno de los preferidos, sobre todo en las grandes ciudades, es el asistente de aparcamiento, una tecnología que facilita la maniobra a la hora de aparcar nuestro coche.
¿CÓMO FUNCIONA?
Para comenzar con la ayuda en esta maniobra, se debe pulsar un botón dispuesto a tal efecto que suele ubicarse en el salpicadero o en la zona central junto al freno de mano. Entonces, los diferentes sensores del vehículo se activan y se comienza la búsqueda de un hueco apto para las medidas del coche. Suele funcionar por debajo de 30 km/h y a no más de metro y medio de distancia de la fila de coches ya aparcados. En cuanto encuentra un hueco disponible y suficientemente grande, el conductor tiene que colocar el coche en la posición que le indica el asistente en la pantalla. A continuación, y tras engranar la marcha atrás, el asistente tomará el control de la dirección para situar el vehículo de forma correcta.
En algunos asistentes, el conductor también tendrá que frenar; en otros más modernos, el coche frenará solo, pero lo suele hacer de forma repentina y bastante agresiva. Después, el sistema pedirá que se engrane la primera para avanzar y el coche solo se encargará de mover el volante para intentar terminar la maniobra. Esto, claro está, si es un aparcamiento en línea. Si es en batería, el asistente también le indicará al conductor todo lo que debe hacer. Esta es una herramienta especialmente valiosa para conductores principiantes o cuando el hueco en el que se quiera aparcar es bastante reducido.
TIPOS DE ASISTENTES DE APARCAMIENTO
Algunos son ya bastante conocidos.
• Sonoro: No toma el control del volante ni realiza ninguna indicación. Solo avisa, mediante un pitido intermitente que acelera su cadencia, de que el coche se acerca a un objeto, ya sea por detrás o por delante.
• Luminoso: Su función es la misma que el anterior, pero en este caso avisa mediante colores de la proximidad de un obstáculo. El rojo es cuando se está más cerca y existe peligro de choque.
• Con cámara: Suele montarse en la parte trasera, pero algunos modelos de más nivel también la llevan delante. La imagen se proyecta en la pantalla central de infoentretenimiento y suele incluirse información del ángulo de giro, de la distancia, etc.
• Semiautomático: Mide el hueco disponible e indica al conductor dónde detenerse para iniciar la maniobra en la que suele tomar el control del volante, dejando acelerador, freno y cambios de marcha al conductor.
• Automático: Solo avisa de dónde se debe detener el vehículo. A continuación, toma el control total sin necesidad de ninguna intervención por parte del conductor. A pesar de esto, se puede interrumpir la maniobra en cualquier momento, con solo accionar el volante o cualquier pedal.
• Remoto: Es el sistema más avanzado, suele ser opcional incluso en los modelos premium más caros y no es precisamente barato. No obstante, no realiza maniobras complejas de forma automática, ya que permite bajarse del coche y, a través del teléfono inteligente (smartphone), se puede mover el coche de forma remota. Pero, los movimientos suelen estar muy restringidos y casi sólo en línea recta hacia delante o hacia atrás. Se suele utilizar en huecos muy estrechos, donde es difícil acceder o bajarse del coche una vez se ha estacionado.
La maniobra de aparcamiento se complica bastante si se trata de un coche con remolque. Pero la tecnología también ha pensado en esto y ofrece soluciones para ayudar en estas ocasiones. El ‘Trailer Assist’ o asistente de remolque ofrece al conductor todas las instrucciones necesarias para aparcar bien el conjunto de coche y remolque en base al hueco disponible para ambos elementos. En este caso, no suele tomar el control de ningún elemento mecánico o electrónico del vehículo y se limita a indicar al conductor lo que debe hacer en todo momento.
Dados los problemas crecientes para aparcar, sobre todo en las grandes ciudades ante el aumento del parque móvil y la escasez de espacio, una de las maniobras más desquiciantes para los conductores es el aparcamiento. Sobre todo su búsqueda, ya que dependiendo de la zona, puede ocupar más tiempo del previsto y llegar a ser desesperante. Por eso, una de las grandes líneas de investigación de los fabricantes de automóviles se está centrando en desarrollar un asistente que permita dejar a los pasajeros en el destino y luego continuar de forma autónoma a un aparcamiento. Evidentemente, al entrar la conducción autónoma en juego, la responsabilidad y la legislación pueden hacer que esta tecnología tarde en llegar a la producción.