Revista "Tráfico": ¿30 años ya?

24 septiembre 2015

¡No puede ser! Esta sensación de perplejidad por el rápido pasar del tiempo creo que está inherentemente asociada a nuestro propio avanzar en la vida y, aunque me alegro enormemente de que nuestra Revista cumpla ya 30 años, no sé si me alegro tanto de ser testigo en primera persona de una buena parte de ellos...

Mis primeros recuerdos de la revista “Tráfico” se asocian a una infografía, la que comparaba la energía cinética de colisiones a diferentes velocidades con la energía potencial asociada a caer desde lo alto de diferentes edificios universalmente reconocidos. Yo estaba preparando unas clases que tenía que dar en la universidad norteamericana donde entonces trabajaba y la infografía en cuestión (que me encontré casualmente) me pareció extraordinariamente original y pedagógica, así que le hice una foto que transformé en transparencia (por supuesto, reconociendo su origen) y la inserté en mi material docente. Inquirí sobre cómo suscribirme a la revista en cuestión, pero muy amablemente me respondieron que, desafortunadamente, había lista de espera en las suscripciones y que tendría que esperar algún tiempo a que se produjesen suficientes bajas para absorber la lista de espera que me precedía. Si no me falla la memoria, la carta la firmaba Jesús Soria, el director.

La casualidad hizo que, casi un año más tarde, coincidiese en una conferencia con el (entonces) Director General, Carlos Muñoz-Repiso, y le comenté la anécdota. Algunas semanas más tarde, empecé a recibirla regularmente por correo. ¡Y en cuántas otras clases y presentaciones profesionales he incluido infografías de la Revista desde entonces! Mejor aún ¡quién nos iba a decir a Jesús Soria, a Carlos y a mí misma que, casi 15 años después de ese encuentro en Santiago de Compostela, estaríamos compartiendo espacio en la celebración de este cumpleaños!

En este número, varios de los profesionales que me han precedido en el papel de Director del Organismo ofrecen amablemente retazos del establecimiento y desarrollo (y a veces supervivencia) de esta herramienta de comunicación. Otros han señalado que nunca se ha querido que fuera propagandística e, incluso, cómo se resistieron a ser incluidos incluso en fotografía… El tiempo lo normaliza todo y también el hecho de que el director (o directora) aparezca de vez en cuando en la misma cuando el editor lo ha estimado necesario. Pero si hay algo que todos los directores que aquí escribimos subrayamos*  es el reconocimiento al valor educativo de la misma, el sincero agradecimiento a la profesionalidad de los componentes del equipo humano que hay detrás de ella y la obstinada defensa de la pervivencia de la misma en los diferentes ciclos de revisión presupuestaria que nos toca vivir.

Aunque no todos los tiempos son iguales. En el que me toca vivir como Directora, el que la revista disminuya su tirada en papel no lo vemos como un problema, sino como la consecuencia directa del mundo en transformación en el que vivimos. Y como una oportunidad de crecer en un nuevo medio que no sólo es un nuevo soporte, sino una nueva manera de hacer las cosas. Nuestra versión digital de la revista llega infinitamente más rápido y más lejos que ninguna tirada que pudiéramos imprimir (y aún así mantenemos una pequeña tirada en papel). A título de ejemplo citaré que, en una semana ‘normal’, recibimos del orden de 8.000 visitas diarias en la web de la revista, pero que hay días concretos (en especial con ciertos artículos) donde el número de visitas ¡supera las 62.000 y semanas de más de 1000.000!

La accesibilidad a la revista en su integridad o a determinados artículos ha facilitado la difusión y redifusión en numerosos otros medios –tanto de soporte papel como de soporte digital–. Y la transformación digital no significa solo que ya no imprimamos en papel (o que imprimamos menos), sino que nos ofrece nuevos modos de comunicación: podemos producir reportajes más a menudo, podemos producir más reportajes, podemos establecer ‘chats’ de comunicación (de los que ya llevamos tres realizados y están teniendo muy buen eco, con hasta 160.000 visitas). Esa transformación digital ha incrementado incluso nuestro ámbito de consulta internacional y a menudo recibimos solicitudes de publicaciones de otros países para replicar los reportajes. Y aunque sigue siendo cierto que algunos de estos otros medios (nacionales o internacionales) no siempre reconocen fielmente el origen de su información, lo cierto es que nada nos satisface más que el ver como el buen trabajo se valora y se reutiliza. Por algo somos servicio público.

Tal y como mencionan algunos antiguos directores, sigue existiendo un Consejo de Redacción, salvo que ahora en él se integra en todas las actividades de Comunicación que se concentran actualmente bajo el propio Gabinete de Dirección. De este modo el gabinete de prensa, redes sociales (Twitter, Facebook, Youtube…), conexiones de radios, la campaña publicitaria y la web se reúne periódicamente para, conociendo el calendario de acciones de novedades de la DGT, programar y coordinar las noticias y reportajes, como también nos coordinamos ante tiempos de “crisis”. Esta coordinación nos permite además aprovechar en múltiples medios los materiales producidos. Por ejemplo, la infografía que produjo la Revista sobre cómo circular en las rotondas la pusimos después en Facebook y, en una semana, se compartió 50.000 veces con 20.000 “me gusta”.

Recientemente, la revista “Tráfico y Seguridad Vial”, y su reportaje “El desafío de la reincidencia”, recibieron el premio periodístico de Línea Directa en su XI edición. Como presidenta del Tribunal, podrán pensar ustedes que tuve algo que ver. Pues no, todos los miembros del jurado son testigos de mi abstención en el proceso de la votación. Como también lo son de mi satisfacción tras escuchar a todos ellos valorar tan positivamente el trabajo realizado por la Revista. Cierto es que en años anteriores ha habido otros premios y reconocimientos, como el del RACE.  Valoraciones externas que validan la importancia de la tarea acometida desde este rinconcito de un Organismo que se extiende por toda la geografía española.

Cómo llegaron varios periodistas a la DGT es ahora ya anécdota. Cómo pelearon por crear cultura periodística en el Organismo es ahora ya historia. Cómo contribuyen día a día al noble esfuerzo de ‘formarnos’ a lo largo de toda la vida es evidente. Cuánto material de extraordinaria calidad producen adaptándose en cada momento a las tecnologías y estilos de comunicación pertinentes está perfectamente documentado. Cuántos accidentes se han evitado o cuántas muertes se han prevenido con su existencia es, por el contrario, de extraordinaria y compleja cuantificación. Tan compleja que otros dirían que es imposible. Pero desde aquí quiero mostrar mi sincero agradecimiento a todas las personas que componen la Revista y a todos los compañeros de la DGT que, con su tarea, contribuyen a que haya material que comentar y divulgar en la Revista y en el resto de medios porque no tengo ninguna duda que, haciendo su trabajo, y haciéndolo bien como desde la Revista se hace, están “haciendo su parte” en pos de la mejora de la cantidad y calidad de vida de nuestra población.

¡Y que cumpláis muchos más!
 

* Y no tengo ninguna duda de que los anteriores Directores opinarían lo mismo.