Alzhéirmer: fallos y despistes al volante
- Casi medio milllón del personas padecen alzhéimer en España
15 septiembre 2014
Unas 800.000 personas padecen demencia en España, el 60% de ellas con alzhéimer, una enfermedad de origen desconocido que comienza a causar estragos en el cerebro mucho antes de que ni siquiera el enfermo pueda sospechar nada; avanza lentamente mientras van apareciendo signos alarmantes, no ya los problemas de memoria (todos tenemos olvidos), sino aquellos que interfieren en la vida diaria, en el trabajo, en el hogar… incluso al volante. La edad es el factor principal de riesgo, aunque no el único: el 12% de los enfermos tiene más de 75 años; el 35%, más de 85; y un 40% supera los 90 años.
Para María Jesús Morala, de la Asociación Nacional del Alzhéimer Afalcontigo, una de las grandes preocupaciones de los familiares es qué hacer para que dejen el volante. “Suele ser un conductor varón con más de 60 años, que oculta o justifica sus problemas al volante. No es raro que se despiste, que no encuentre una calle o que se pierda. Que le piten no significa nada porque no recuerda que ayer también le pitaron”.
ALTERACIONES AL VOLANTE. Algunos estudios han demostrado el incremento del riesgo de accidente de estos pacientes y la correlación entre las dificultades de la conducción y el deterioro cognitivo. El Servicio de Neurología del Hospital Universitario de La Paz (Madrid) ha realizado un estudio para detectar los problemas de estos pacientes al volante y los incidentes que sufren con mayor frecuencia. Se ha contado con la colaboración de personas sanas junto con dos grupos, uno con deterioro cognitivo ligero y otro con alzhéimer diagnosticado.
Las diferencias con las personas sin ningún tipo de deterioro se centraban en aspectos como dudas en las salidas de carril, distracción con estímulos auditivos externos, toma de decisiones inadecuadas ante situaciones imprevistas, irritabilidad al volante y dificultad para realizar maniobras de giro y aparcar. De todas estas alteraciones, las dudas en las salidas de las autopistas y la desorientación al transitar por lugares conocidos se relacionaron en mayor medida con el posterior desarrollo del alzhéimer. En todo caso, se apreció que los trastornos en la conducción se hacen más graves y frecuentes a medida que avanza el deterioro cognitivo.
El test, dirigido a familiares de potenciales enfermos que conducen, se basa en la observación de los últimos seis meses y, dará pistas sobre la conveniencia de acudir al médico.
1. ¿Ha notado cambios en la conducción?
2. ¿Se distrae si conduce con música, con la radio encendida o le hablan?
3. ¿Reacciona inadecuadamente ante situaciones peligrosas o inesperadas?
4. ¿Se pone más irritable cuando va conduciendo?
5. ¿Duda a la hora de tomar las salidas de las autopistas?
6. ¿Ha confundido en alguna ocasión el freno con el acelerador?
7. ¿Tiene problemas para cambiar de marchas?
8. ¿Se confunde con las señales de tráfico?
9. ¿Tiene dificultades para realizar maniobras de giro, aparcar, etc?
10. ¿Se ha equivocado de carril?
11. ¿Se ha perdido en lugares conocidos?
12. ¿Le ha visto desorientado en lugares conocidos?
13. ¿Lleva una velocidad no apropiada?
14. ¿Ha provocado algún desperfecto o accidente?
15. ¿Han aumentado las multas de tráfico?
(Fuente: Hartford Financial Services Group8).