Pistas para evitar accidentes
- La Criminología Vial estudia el delito que afecta a la seguridad vial y propone soluciones para evitarlo.
13 octubre 2014
La Criminología Vial es la ciencia que estudia el delito que afecta a la seguridad vial en todas sus dimensiones y consecuencias. Actualmente, la Criminología también tiene una función preventiva, como explica Fernando Miró, director del centro 'Crímina': "Pretendemos conocer cómo sucede el incidente vial y cómo podemos evitarlo. La Criminología está empezando a comprender que tiene un importante papel en la seguridad vial, aplicando sus conocimientos científicos en la prevención de la siniestralidad”.
Ciencia multidisciplinar
Los expertos afirman que, dado su carácter multidisciplinar, la Criminología puede aportar cambios en las políticas de seguridad vial y ayudar a diseñar intervenciones. “Ante un problema general como es el de la siniestralidad en el tráfico, son necesarios todos los medios disponibles para combatir los delitos viales”, explica Álvaro Bellas, magistrado del Juzgado de lo Penal 2 de Cartagena. Uno de los objetivos de la Criminología es conocer científicamente las causas en los accidentes y prevenirlos en el futuro. Los criminólogos defienden que los –mal llamados– accidentes no son aleatorios y están sujetos a patrones de forma que, conociendo las rutinas del conductor, es posible realizar intervenciones previas al accidente.
Cambiar el entorno
El factor ambiental es otra de las claves en Criminología. Importa no solo el agresor, también el entorno social pues, modificando el entorno también es posible reducir los delitos. Para Raimundo García, presidente de la Asociación Española de Accidentología Vial (AEAV), el mayor problema en la seguridad del tráfico en España es que “la trasgresión está más aceptada” que en otras facetas del Derecho Penal. “La línea que separa el delito de la infracción no está socialmente tan interiorizada: si alguien conduce bebido y causa un accidente, se suele decir ‘tuvo mala suerte’. Esa permisividad social es lo que debemos cambiar”, opina García.
El año pasado, según la Memoria del Fiscal General del Estado, se dictaron casi 84.000 condenas por delitos contra la seguridad del tráfico: el 65% de ellas fueron por conducir bajo los efectos del alcohol y las drogas; y un 30%, por conducir sin permiso. Respecto al tipo de castigos, se impusieron casi 1.800 penas de prisión, más de 45.000 de trabajos en beneficio de la comunidad, 750 programas de educación vial y más de 36.000 penas de multa. Además, se dictaron casi 59.000 penas de privación del derecho a conducir.
