Así funciona CAPA
- Se premia con más tiempo de examen a las autoescuelas con mejor porcentaje de aprobados
14 enero 2021
En el primer trimestre de 2021, la DGT tendrá implantado en todas las jefaturas provinciales el sistema CAPA, un algoritmo que permite ajustar y “repartir la capacidad de examen de cada jefatura provincial –explicó María José Aparicio, subdirectora de Formación de la DGT en un seminario web– entre la demanda de las autoescuelas de la zona. Es un gran esfuerzo de la DGT para responder a las necesidades del sector”, añadió.
Bolsa y capacidad
CAPA parte del concepto “bolsa”, entendido como el número total de alumnos con el examen teórico aprobado en los dos últimos años para el B (o con la prueba de destreza aprobada, para el resto de permisos) –que son los que se pueden presentar a la prueba práctica–, expresado en minutos, ya que el examen, en función del permiso al que se opta, dura 30 minutos (B), 35 (A) o 50 (C y D).
La capacidad de examen la fija la Instrucción de Calidad de la DGT en base al número de examinadores de cada jefatura (12 pruebas del permiso B por examinador y día). Con esta cifra y habiendo determinado un ciclo para que las autoescuelas puedan presentar a examen –fijado en un mínimo de 5 y un máximo de 15 días hábiles, a determinar por cada jefatura provincial–, se asigna a cada escuela de conductores el número de alumnos que puede presentar en función del porcentaje de estos que dicha escuela tiene en la Bolsa. Así, a una autoescuela con el 50% de los alumnos en bolsa, se le da el 50% de la capacidad de examen de la jefatura por ciclo.
Factor de corrección
Para evitar distorsiones en la bolsa y que un alto índice de suspensos otorgue mayor capacidad de examen, la DGT ha añadido un “factor de corrección”. Este compara el porcentaje de aprobados en examen de circulación del permiso B de cada escuela con la cifra general de aprobados del centro de examen y 'premia' con más tiempo –en definitiva, alumnos– a aquellas cuya cifra de aprobados supere la media y resta tiempo, a quienes tengan una cifra inferior a dicha media (ver ejemplo).
Para ello, este algoritmo actualiza todos sus datos (alumnos en bolsa, porcentaje de aprobados en primera convocatoria, etc.) cada 15 días, de forma que las disfunciones sean mínimas. No obstante, las autoescuelas de nueva creación no tienen factor de corrección hasta pasados 3 meses de su puesta en marcha, ya que no tienen suficientes datos del porcentaje de aptos en primera convocatoria hasta pasar ese período.
Reservas y recuperación
CAPA es un algoritmo que admite modificaciones y mejoras constantes. Por ejemplo, María José Aparicio (DGT) comentó que “en algunas provincias se observó que algunas escuelas no cubrían la cantidad de alumnos que CAPA les asignaba, por lo que, de acuerdo con las jefaturas provinciales, se habilitó un sistema de reserva”.
“Una de las máximas de la DGT –explica Mª José Aparicio– es optimizar al máximo nuestra capacidad. No queremos perder capacidad de examen”. Así, el Sistema de Reservas de CAPA permite a las escuelas de conductores, una vez asignado el tiempo (y alumnos) de examen, a presentar a aquellos “alumnos que crea que están preparados y que no han podido presentar porque CAPA no les ha asignado tiempo suficiente”.
Estos alumnos en reserva serán examinados, en caso de que haya tiempo sobrante porque haya escuelas que no presenten a todos los alumnos asignados. Además, recientemente se ha habilitado la “recuperación de minutos”. Por ejemplo, si una autoescuela a la que se han asignado 180 minutos presenta 6 alumnos del permiso B, no le sobraría tiempo; pero si presentara solo alumnos del C, solo podría presentar 3 alumnos y ‘perdería’ 30 minutos (con 2 C y 2 B, solo perdería 20 minutos). Para recuperar esos minutos se acude en primer lugar al Sistema de Reservas, si no hubiese reservas se acumularían a la capacidad del ciclo posterior de la escuela que los ha perdido.
Pero, para ser justos con esas escuelas que ‘pierden’ minutos, esas autoescuelas tienen prioridad a la hora de asignar reservas, a las que seguirán, en dicha asignación, las demás escuelas por orden del ciclo. Cuando se llega al límite de la capacidad de examen, se guarda el dato para comenzar la asignación del siguiente ciclo por esa escuela. No obstante, esta asignación de reservas es configurable por cada jefatura provincial, que puede priorizar también el examen de determinado tipo de permisos.
Un ejemplo práctico
Un ejemplo práctico ilustra cómo reparte CAPA la capacidad de examen de una jefatura provincial y cómo afectaría el factor de corrección en función del porcentaje de aptos de dicho centro de examen. Así, una autoescuela (A) que tuviera en la bolsa 505 alumnos –el 51% de la Bolsa– se le otorgaría la mitad de la capacidad de examen (200/2= 101). Pero como su porcentaje de alumnos aptos está 4 puntos por encima de la media del centro de exámenes (46% frente a 42%) su capacidad se vería incrementada en un 3,6% y se le otorgarían 105 plazas.
Ciclo: 5 días • Capacidad: 200 pruebas • Bolsa total: 1.000 • Porcentaje aptos centro de examen: 42%
ESCUELA | PORCENTAJE (Bolsa) | CAPACIDAD (Bolsa) | PORCENTAJE APTOS | FACTOR DE CORRECCIÓN | CAPACIDAD FINAL |
---|---|---|---|---|---|
A (Bolsa 505) | 51% | 101 | 46% | (+3,6%) | 105 |
B (Bolsa 205) | 21% | 41 | 31% | (–10,7%) | 37 |
C (Bolsa 70) | 7% | 14 | 55% | (+12,6%) | 16 |
D (Bolsa 220) | 22% | 44 | 37% | (-5,5%) | 42 |
Con CAPA, la DGT ha tratado de solventar un problema histórico. Ya en el año 2000, una orden ministerial estableció un cupo de 4 alumnos por profesor y semana para presentar alumnos a examen, sistema que en 2005 el Tribunal Supremo ordenó eliminar.
Más tarde se estableció un orden secuencial por autoescuelas, que provocaba mucha incertidumbre en las escuelas (era prácticamente imposible prever la fecha de futuros exámenes) y muchas anulaciones de última hora –reduciendo más la capacidad de examen– y la presentación de alumnos sin suficiente preparación. Por ello, las asociaciones de escuelas de algunas provincias decidieron autoregularse, fijándose ellas un cupo. Este sistema fue recurrido, incoándose procedimientos sancionadores ante la Autoridad Catalana de la Competencia y la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).
Por ello, el diciembre de 2017 la Subdirección Adjunta de Formación Vial organizó un grupo de trabajo que diera solución a este conflicto, de cuyos trabajos salió CAPA. “Este es un buen sistema de organización –explica Mª José Aparicio, de la DGT–, pero en aquellas jefaturas donde faltan examinadores, seguirá habiendo problemas”.