“Ella no hablaba. De pronto vi que no podía hacer nada”
27 marzo 2019
Un sábado, volviendo a casa, Miguel se durmió al volante y, en una recta, chocó con una furgoneta que venía en sentido contrario. El coplito, una chica de 30 años, murió. “La cabeza es una lavadora, todos los días estas dándole vueltas al ‘coco’, piensas que vas a perder a la familia, el trabajo, el juicio..."