Impulso decisivo a la implantación del e-Call
- Con ello se estima una reducción en torno al 5% del número de muertos por accidentes de carretera (unas 1.500 vidas en Europa), y la gravedad de los heridos, el 6%
28 noviembre 2014
España lidera junto a países como Bélgica, Bulgaria, Dinamarca, Luxemburgo y Turquía la segunda fase de este proyecto financiado por la Unión Europea y coordinada por ERTICO.
El sistema e-Call es un sistema de llamada automática al servicio de emergencia 112 que se activa por sí solo cuando un vehículo se ve implicado en un accidente de tráfico. Este sistema puede reducir de forma espectacular el tiempo de respuesta de los servicios de emergencia, ya que georeferencia la localización exacta del accidente y facilita información adicional decisiva para salvar vidas o reducir las consecuencias de las lesiones (modelo del vehículo, localización exacta del accidente, número de heridos...). De hecho, desde el momento de activación del sistema hasta que se recibe la llamada en el centro tecnológico de recepción, se ha registrado un tiempo entre 10 y 12 segundos. Una medida que se ha estimado podría reducir en torno al 5% el número de muertos en accidentes de tráfico (unas 1.500 vidas en Europa), y la gravedad de los heridos, el 6%
Para comprobar la efectividad de este sistema se han equipado 12 coches y 10 motocicletas que llevan incorporado este dispositivo y se ha contado con los centros 112 de Galicia, Castilla y León, Madrid y Comunidad Valenciana que son los que están participando en el proyecto piloto nacional.
Objetivo 2017
España continuará trabajando para disponer, el 1 de octubre de 2017, de la infraestructura tecnológica necesaria para el funcionamiento y prestación del servicio e-Call interoperable en Europa.
Para conseguirlo, es necesario seguir evolucionando en cuestiones como: adecuar la red de telecomunicaciones móviles que permitan redirigir las llamadas de los vehículos con los criterios de gratuidad y prioridad; introducir de forma rápida y masiva por parte de los fabricantes del dispositivo en los nuevos vehículos; establecer el procedimiento para la comprobación del sistema en la inspección técnica periódica de vehículos que comunica on line con el registro de vehículos de la DGT y la instalación con garantías del sistema eCall en vehículos que ya están en circulación y que no incorporan el sistema de fábrica.
Además, el proyecto español trabaja en otras líneas suplementarias orientadas a reforzar los objetivos de mejora de la respuesta y de la información a los servicios de emergencia para realizar un buen servicio:
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El tratamiento de la incidencia y transmisión a los Centros de Gestión de Tráfico que les permitirá actuar incidiendo en la reducción de las congestiones causadas por los accidentes de tráfico, facilitando el acceso de los servicios de emergencia y evitando accidentes secundarios provocados por la falta de protección del lugar del accidente.
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La posibilidad de ofrecer la hoja de rescate del vehículo a los servicios de emergencia, de modo que sepan cuáles son las zonas de corte adecuadas de los coches para atender a los heridos lo más rápido posible.
España es el único país de la UE que están ensayando la incorporación del eCall en las motos. Para ello, se están realizando pruebas con 10 motocicletas, tanto en el mecanismo de detección del accidente como en la transmisión de llamada. En el primero colaboran el CEIT (Centro de Estudios e Investigaciones Técnicas de Guipúzcoa) y el fabricante de cascos NZI. El casco y la moto disponen de sensores, y si se superan unos umbrales de deceleración (no se confundirá con la simple caída del casco al suelo), se genera la llamada; para ello se trabaja en cuestiones, como la deformación del casco, e incluso se estudia la posibilidad de incorporar información sobre la gravedad del accidente (ver reportaje).