Guía contra los malos humos
- El manual pretende ayudar a las autoridades municipales a implantar sus zonas de bajas emisiones para reducir la contaminación atmosférica y mejorar la calidad del aire.
18 junio 2021
La Federación Española de Municipios (FEMP) ha presentado la primera guía técnica para la implementación de Zonas de Bajas Emisiones (ZBE), “una apuesta real y permanente por ciudades saludables, sostenibles y seguras, ciudades donde de verdad puedan vivir las personas”, ha explicado Carlos Daniel Casares, Secretario General de la FEMP.
El manual, realizado conjuntamente entre la FEMP y el Área Metropolitana de Barcelona (AMB) en colaboración de la DGT, toma como referencia la ZBE del Área Metropolitana de Barcelona, y pretende ayudar a las autoridades municipales a implantar estas zonas para reducir la contaminación atmosférica y mejorar la calidad del aire, que serán obligatorias a partir de 2023 en las 149 ciudades españolas con más de 50.000 habitantes.
“La ZBE Rondas BCN es la más grande del sur de Europa e incluye a casi 2 millones de residentes. Por sus características es extrapolable a cualquier urbe de España de tamaño grande o mediano. Por ello hemos elaborado esta Guía y nos ofrecemos a compartir la experiencia técnica con todos aquellos municipios interesados”, ha asegurado el vicepresidente de Movilidad, Transporte y Sostenibilidad del AMB, Antoni Poveda, que ha añadido que esta medida está ya implantada en más de 200 ciudades europeas.
"Vivir más y mejor"
“Los ayuntamientos queremos una movilidad sin humos, sin ruido y sin muertos en nuestras calzadas. La movilidad saludable es el objetivo final, vivir más y mejor”, ha afirmado Alfonso Gil, presidente de la Comisión de Transportes, Movilidad Sostenible y Seguridad Vial de la FEMP, destacando que la implantación de ZBE para reducir las emisiones no sólo se hará en estos 149 ayuntamientos: “Otros muchos alcaldes y alcaldesas de ciudades españolas que no tienen la obligación también van a explorar estas vías porque están comprometidos con la mejora de sus pueblos y ciudades”.
Además, con el fin de facilitar la implantación de estas zonas urbanas de bajas emisiones, la DGT ha aprobado una instrucción en la que se crea la señal vertical de ZBE e invita a los ayuntamientos a comunicar a la plataforma DGT 3.0 las regulaciones de acceso establecidas en sus municipios.
“Los ciudadanos van a poder conocer qué zonas de bajas emisiones hay en la ciudad por la que vayan circulando, ya que la plataforma del vehículo conectado DGT 3.0 está en disposición de recibir la información sobre zonas de bajas emisiones u otras restricciones, sus horarios y los vehículos a los que afecta, para a continuación compartirlo de modo que los fabricantes de vehículos, los navegadores y las aplicaciones de movilidad podrán conocer el grado de restricción que afecta a sus itinerarios en todo momento”, ha explicado Susana Gómez, subdirectora general adjunta de Vehículos de la DGT.
Para la puesta en marcha de estas zonas de bajas emisiones y para la transformación de las flotas de vehículos en flotas no contaminantes, los ayuntamientos van a tener a su disposición 1.500 millones de euros procedentes de fondos europeos.
Recientemente, la FEMP ha presentado también la guía para implantar el límite de velocidad a 30 km por hora, realizado conjuntamente con la DGT, con el objetivo de ayudar a los ayuntamientos a aplicar esta nueva modificación del Reglamento General de Circulación.
La FEMP expone en su guía el procedimiento técnico de implantación de zonas de bajas emisiones para reducir la contaminación en las áreas urbanas.
El manual, que va a ser enviado a los municipios españoles de más de 50.000 habitantes, toma como referencia la Zona de Bajas Emisiones del Área Metropolitana de Barcelona, que tiene estos cinco ejes clave:
- Distintivos ambientales de vehículos de la DGT.
- Ordenanzas municipales común para establecer las restricciones en la circulación necesarias y un régimen sancionador.
- Control automático de vehículos mediante cámaras para lectura de matrículas.
- Señalización común para todas las ZBE.
- Comunicación, participación y sensibilización al ciudadana.